El deporte no tiene edad

Facundo Dios durante su participación en la maratón de Nueva York. | DA

JOSÉ MANUEL MARTÍN | Santa Cruz de Tenerife

Facundo Dios Mosegue, lo suyo tiene mérito. Vive en el barrio Toscal-Longuera de Los Realejos, y decide en noviembre de 2009 empezar a correr con la idea de bajar de peso y de mejorar su vida. Se lo propuso con 53 años de edad, cuando pesaba demasiado (85 kilos) para su estatura (1,69). Entonces se marcó una meta: invertir en salud y reinventarse, porque “al mirar hacia abajo no me veía ni las uñas de los pies”. Decide ir al estadio de atletismo de Los Realejos, primero a caminar por la parte exterior de la pista, antes de correr. Y así, “poco a poco, me fui soltando, hasta que conocí a Vicente Cabrera Álvarez, de 77 años de edad, que me había fijado por la forma tan elegante que tenía de correr”.

Fue tanto lo que se entusiasmó Facundo que en marzo del pasado año 2010, y con pocos meses de preparación, decidió correr el media maratón de Berlín, pero con la idea de disfrutar. Comenzó la preparación, y su aventura tuvo un final feliz. “Aquí estaba con Vicente, Fernando, Ricardo, David, Héctor y Tere. Yo era el novato, sin hacer ninguna prueba ni siquiera a nivel local; en cambio ellos ya tenían sus marcas, pero la acabe con un registro de 1:59:00”, comentó Facundo. Pero lo mejor estaba por venir.

En junio del pasado año, se empezaba hablar del maratón de Nueva York, y tras programar toda la preparación, llegó el gran día. Ya había estado en Nueva York en otro viaje anterior. La gran manzana lo apasionaba. Había tres opciones para participar: por marca conseguida en anteriores maratones, comprando el dorsal o por sorteo de lotería. Y en septiembre ya estaba admitido.

Llevó un plan de entrenamientos y una dieta por espacio de catorce semanas, descansando dos días en semana y corriendo el resto una media de 80 a 100 kilómetros semanales, en progresión de intensidad cada semana, hasta alcanzar unos 1.100 kilómetros”. El Parque Taoro, Garachico, Las Raíces, Siete Cañadas, Bajamar, La Punta, Las Teresitas, Chanajiga, La Caldera, entre otros los lugares, fueron sus escenarios, para ponerse a punto en Tenerife.
50.000 corredores

El 7de noviembre pasado, se ve en la Gran Manzana. Facundo participó con el dorsal 31.474, e invirtió 4 horas, 21 minutos y 28 segundos, en “un ambiente increíble con corredores de todos los países del mundo. Me vi con unos cincuenta mil corredores, entre ellos Vicente, y Felipe, que venían de Tarragona. Antes de llegar al kilómetro diez, escuché a alguien que me dijo: ‘Adiós canario’, pero me giré y ya no vi a nadie. Luego me enteré de que me habían llamado unos corredores de una tienda de deportes Base Tarragona, que al ver que yo llevaba la camiseta de Base Deportes Salud, sabían que venía de Canarias”. Facundo se emociona cuando relata kilómetro a kilómetro su experiencia de cuatro horas. Llegó a la meta marcando 6,19 por kilómetro. Facundo, Vicente y Felipe habían completado su objetivo: terminar el maratón de Nueva York, algo impensable para Facundo unos meses atrás.

Al día siguiente, según relata, “fui a comprar el periódico The New York Times para ver mi nombre en el maratón. Un día de satisfacción, con nuestras ropas de running, deportivas y la medalla que lucimos por las calles de Nueva York, sacando pecho de haber terminado la gesta más importante”.

Y todo gracias a Vicente Cabrera, este joven, según define Facundo Dios, de 78 años que ha participado en ocho ocasiones en el maratón, y el que lo animó y lo aconsejo para que pudiera acudir a Nueva York.

Ahora hay más retos para Facundo. Antes de cumplir los 60 años de edad, “me propongo correr los cinco grandes maratones del mundo: Nueva York, Berlín, Boston, Londres y Chicago. Espero que el dinero me alcance para cumplir este sueño. Hay que pensar que nunca es tarde para hacer deporte; todos tenemos que reinventarnos”.