EUROPA PRESS | Caracas
El Gobierno de Hugo Chávez ha anunciado este lunes nuevas medidas y sanciones en otro intento por atajar la crisis eléctrica que ha provocado una serie de apagones en las últimas semanas, generando una gran molestia en la ciudadanÃa y perjudicando la actividad comercial e industrial en esa nación petrolera.
Las medidas han sido anunciadas por el vicepresidente ejecutivo, ElÃas Jaua, en nombre de Chávez, quien se encuentra en Cuba recuperándose de una operación. Los apagones que el pasado fin de semana se prolongaron durante casi 24 horas en siete estados del noroeste de Venezuela obedecen a “una polÃtica permanente de sabotaje pasivo y activo del sector”, ha denunciado Jaua.
El Gobierno atribuye la crisis al “uso no adecuado del servicio” por parte de la ciudadanÃa y el sector comercial que aprovecha el valor de las tarifas eléctricas, las cuales han estado “subsidiadas y congeladas desde hace de 10 años”. Pero además obedece -según Jaua- al aumento de los ingresos de los venezolanos que ahora pueden adquirir más tecnologÃa.
Las medidas ordenadas por Chávez va orientadas a promover el “uso racional y eficiente de la energÃa eléctrica por parte de los organismos públicos”, los cuales deberán conformar “grupos de gestión de energÃa eléctrica”, cuya función será la de hacer seguimiento a las estrategias para reducir el consumo.
Las instituciones deberán contar además con “sistemas de autoregeneración” entre las 11.00 horas (17.30 horas en la España peninsular) y las 16.00 horas (22.30 horas) y entre las 18.00 horas (00.30 horas) y 22.00 horas (04.30 horas).
“Los organismos públicos que no cumplan las directrices emanadas en esta resolución podrán ser objeto inmediato de suspensión del servicio eléctrico”, ha advertido el vicepresidente.
La advertencia también va dirigida a las empresas del sector privado -que tengan contratada una demanda de un megavoltio amperio-, las cuales a partir de ahora tendrán la obligación de “realizar acciones para mantener una reducción de al menos un 10 por ciento de su consumo mensual”.
El incumplimiento de las medidas acarreará “un recargo tarifario de un 10 por ciento sobre la factura del mes correspondiente y si reincide se irá incrementado mensualmente en un cinco por ciento por cada reincidencia”.
Los que estarán exentos de estas regulaciones son los servicios de atención médica, la producción de agua potable, productores y distribuidores de hidrocarburos y sus derivados; los cuerpos de seguridad, los recolectores de desechos sólidos, el transporte público terrestre, aéreo y marÃtimo, servicios de telecomunicaciones, medios de comunicación social, la educación, semáforos, embajadas y otros casos adicionales que considere el Ministerio de EnergÃa.
“Nosotros no estamos inventando ninguna de estas medidas, son las medidas recomendadas por los organismos internacionales en la materia destinadas a fomentar un uso adecuado de la energÃa a la preservación del ambiente y garantizar el consumo de energÃa eléctrica”, ha explicado Jaua.
La culpa es del derroche
El Gobierno ha reconocido que para poder superar esta crisis y evitar que continúen los apagones es necesaria “una mayor generación de electricidad” pero ha insistido en achacar los apagones al uso “excesivo” de la electricidad por parte de la población.
“Hay un incremento de las condiciones de los hogares venezolanos, hay una demanda excesiva, un derroche de energÃa crÃtico de la sociedad. Cualquiera dirá que culpamos al pueblo del derroche, pero no es el pueblo, es que tienen un poder económico mayor”, ha expresado el ministro venezolano de EnergÃa Eléctrica, Alà RodrÃguez Araque.
En 2012 el Gobierno espera aumentar 3.824 megavatios la capacidad de generar eléctrica para paliar el aumento del consumo, ha anunciado el ministro.