El decapitador: “No me gustan los seres humanos”

Dean Valentinov Deanov es el protagonista de este video colgado en YouTube un año antes de cometer su brutal crimen en el sur de Tenerife. | YOUTUBE

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

“Cuando oí la frase ‘No me gustan los seres humanos’ se me encendió el piloto rojo, la alerta. Fue un reflejo profesional”. Es la impresión del reputado psicólogo clínico tinerfeño Alfonso Delgado tras ver con atención el vídeo que, aproximadamente un año antes de cometer su brutal crimen, grabó sobre sí mismo Dejan Valentinov Deyanov, el joven de 28 años que decapitó a Jennifer Mills sin mediar mayor palabra en la triste mañana del 13 de mayo pasado.

Aunque obviamente no se le puede pedir a Delgado un diagnóstico sobre Dejan por los poco más de seis minutos de visionado, su opinión arroja luces sobre la personalidad del terrible individuo. “Esa frase [“I don’t like the human being”, literalmente del inglés “no me gusta la existencia de los humanos”] sin duda llama la atención del profesional que viera esas imágenes sin saber lo que luego pasó. De resto, no hay indicios de una perturbación profunda”.

El vídeo en cuestión muestra a Dejan en su día a día en Los Cristianos mientras intenta captar clientes frente a un restaurante para el que trabaja. “Aunque filmarse a sí mismo continuamente hablando no es habitual”, continúa Delgado, “salvo la referida frase, Dejan está haciendo lo que muchísimos jóvenes en el Sur de Tenerife: buscarse la vida. Se le ve interactuando con personas que pasan y que nadie le hace caso, salvo uno que parece ser su amigo. No es fácil resultar indiferente a los demás de forma continua”, recuerda el especialista.

Dejan, en su vídeo autobiográfico, mientras consume lo que parece ser un cigarrillo de hachís. | DA

Narcisista y desplazado

Aclarando una vez más que sólo se toma el vídeo como referencia y que no se trata de un diagnóstico, Delgado describe a Dejan como “alguien narcisista, muy centrado en sí mismo, aparentemente joven,… pero desplazado”.
“En el momento del vídeo, si existe una psicosis está muy encubierta, aunque hay gente aparentemente inofensiva que luego resultan ser auténticos monstruos, porque saben muy bien cómo defender su imagen”, amplía el psicólogo.

En definitiva, Delgado detalla que “si no supiera quién es, pensaría que se trata del típico joven con cierta autoestima al que gusta llamar la atención. Habla mucho y en varios idiomas, y no se le aprecian indicios de perturbación profunda, aunque la toxicomanía -se le ve que aparentemente se fuma un porro- puede actuar como detonante”.

No es fácil resultar indiferente a los demás de forma continua

Por su parte, para el criminólogo y especialista en seguridad ciudadana Sergio García, el caso de Dejan “es otra prueba de que el sistema no funciona, y pone en entredicho las políticas en cuanto a las personas que sufren problemas mentales”.

Para fundamentar sus palabras, García recuerda que “Dejan fue puesto en libertad por psiquiatras británicos en enero de este año, lo buscaba un juzgado de Arona por no presentarse y la Policía Local realizó cuatro informes alertando sobre su presencia. Sabemos cuál fue el lamentable resultado final de este caso”.

“La Comisión de Derechos Humanos de las Organización de Naciones Unidas”, recuerda el criminólogo, “considera un derecho que las personas que sufren una enfermedad mental sean protegidas contra posibles riesgos, y el artículo 49 de nuestra Constitución Española obliga a los poderes públicos a realizar al respecto una política de previsión, tratamiento, rehabilitación e integración de los disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos. O cumplen las normas o las cambian, a ser posibles adaptándolas a la realidad de hoy”, remacha Sergio García.

Sobre el caso concreto de Dejan, este especialista en seguridad ciudadana es rotundo: “Era una bomba de relojería; en él se concentraban los cuatro elementos de riesgo que desembocan en la desgracia; una enfermedad mental grave, carencia de tratamiento y seguimiento médico, soledad-abandono-indigencia y el consumo de drogas”.

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“Tenerife adolece de soluciones”

“Está claro que Tenerife adolece de una buena política social, y hechos recientes, donde bien directamente o indirectamente se han visto involucrados los indigentes, lo confirman: desde el espelúznate caso de la decapitación del Sur hasta los ocho fallecidos, al parecer de muerte natural, en distintos rincones de nuestra Isla”. Así de claro lo resume el criminalista y especialista en Seguridad Ciudadana Sergio García.

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