El final del imperio del silicio ha llegado

DANIEL GARCÍA VELÁZQUEZ * | Santa Cruz de Tenerife

El nuevo material grafeno tiene múltiples aplicaciones. / DA

Reino Unido piensa rascarse el bolsillo e invertir 57 millones de euros en la creación de una especie de Graphene Valley (que tiemble el californiano Silicon Valley, ya que el grafeno puede ser el material que desbanque al silicio de los dispositivos electrónicos). El grafeno, considerado el material más fino y resistente entre los materiales conductores, fue descubierto en 2004 en la Universidad de Manchester por Andre Geim y Kostya Novoselov (ambos científicos galardonados con el Premio Nobel de Física 2010), teniendo el potencial de revolucionar la ciencia de los materiales.

El grafeno es un material dispuesto como una monocapa de átomos de carbono (otro de los derivados naturales del carbono son, por ejemplo, el grafito de los lápices y el diamante de las joyas) dispuestos en una red hexagonal. Pero su gran inconveniente para comercializarlo, su delgadez molecular, ha sido superado gracias al encapsulamiento del grafeno con otro material que lo utiliza como plataforma.

En el último número de la revista Nature Physics, el equipo descubridor del grafeno ha mostrado como se verá, probablemente, en el futuro el grafeno dentro de los circuitos electrónicos. Intercalando dos láminas de grafeno con otro material en dos dimensiones, el nitrato de boro, el equipo ha creado una especie de Big Mac (haciendo alusión a la famosa hamburguesa) de grafeno: una estructura ensamblada por cuatro capas, que podría ser la clave para sustituir el chip de silicio en los procesadores de los ordenadores. El empleo de nitrato de boro ha permitido a los investigadores por primera vez observar cómo se comporta el grafeno cuando es afectado por las condiciones ambientales, aislándolo así de la influencia negativa del medio y controlando sus propiedades electrónicas de una manera que antes era imposible.

El encapsulamiento del grafeno con este otro material ha mejorado notablemente las propiedades del mismo hasta tal punto, que ya se puede vislumbrar un futuro comercial prometedor en la construcción de transistores y microchips de grafeno.

Esta nueva combinación de materiales originará una revolución en la electrónica de consumo y en las conexiones ultrarrápidas a través de Internet.

Cabe mencionar que los investigadores no patentaron el descubrimiento, lo “regalaron” a la comunidad científica para el desarrollo del conocimiento y el beneficio de la humanidad. Con este tipo de avances es lo que suele pasar cuando los gobiernos invierten en ciencia.

*Doctor en Ciencias Químicas (Química Orgánica), Universidad de La Laguna. Profesor de Ciencias en el Colegio Hispano Inglés.