Orlando Cova, el poeta de San Andrés

El poeta santacrucero Orlando Cova Adrián . | DA

EL PERSEGUIDOR | Santa Cruz de Tenerife

Orlando Cova Adrián nace en 1957 en el pueblo marinero de San Andrés, en el seno de una familia humilde y contestataria.

En ese ambiente, el joven Orlando desarrolla un gran sentido crítico, ante la injusticia social, que lo lleva a escribir como una terapia personal. En 1981 termina lo que él considera su primer poemario y sigue escribiendo hasta que en 1984 ve publicados una plaquette con una selección de su obra y dos libros de poesía. Combina su quehacer literario -en el que también se adentra en el relato y la novela- con su trabajo en el Hospital Universitario de Canarias, hasta que consigue la baja por depresiones, una constante en su vida.

Orlando Cova, el Poeta de San Andrés, fallece el pasado 1 de octubre y deja un poemario póstumo, Los bares de Isabel, que será presentado el miércoles 23 de noviembre a las 18.30 horas en la Mutua de Accidentes de Canarias (calle Robayna, 2) por los escritores y amigos del poeta fallecido, Jesús R. Castellano, Marcelino Marichal y Ánghel Morales.

El pasado 25 de octubre, por iniciativa de un grupo de amigos, escritores y poetas, y al amparo de la Librería del Cabildo e Ideco, se le rindió un sentido homenaje con una nutrida asistencia entre la que se encontraban su mujer, Belén, y su hija Vania, a quienes se les hizo entrega del original de una portada (De piel y palabras), obra del artista Alfonso García, ilustrador de tres de sus libros.

El acto contó con numerosas intervenciones de gente de la cultura, una larga serie de poemas de Cova y un recital musical de la cantautora Marisa Delgado y el guitarrista Rubén Díaz. Al final, se proyectó un audiovisual que incluyó entre sus fotografías retrospectivas un recital del propio poeta grabado con ambientación musical en 2002.

Despedidas y luces

De territorios regresamos.
¡Que exista un compañero y creeremos en todo!

Que venga aquí y partan pan,
que escancie vino, rutas, pasiones,
que se ejecute el milagro de un himno

Si es capaz, que nos indique una luna,
que se desvanezca en mil muertes,
que nos enseñe despedidas y luces.

Deseo irme de este cansancio que soy;
toda mi fe está en ti, amigo,
no me faltes,
no te fallo.

ORLANDO COVA, ‘De sábanas sangrantes’ (2009)