Guillén no quiere confianzas

Richi Guillén, en el spa del Grand Hotel Iberostar Mencey. / ÁLEX ROSA (ACFI PRESS)

DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

El pívot del Iberostar Socas Canarias, Ricardo Guillén, actual MVP de la Adecco Oro, ha elegido el Iberostar Grand Hotel Mencey para pasar con su familia los escasos días de descanso que concede el miniparón de la competición dentro de la liga regular.

El interior tinerfeño ha disfrutado de las instalaciones de un clásico del turismo insular de todos los tiempos, recientemente modernizado con una espectacular reforma. Es el descanso del guerrero. Guillén repasó para la página web oficial del club www.cbcanarias.net la actualidad del primer equipo aurinegro.

El tinerfeño hace un balance “muy positivo” de las 15 jornadas celebradas hasta la fecha, barrunta partidos muy duros en la segunda vuelta donde habrá que “estar preparados para todo” y advierte que la clave estará en “tener paciencia y estar unidos cuando lleguen los momentos malos”.

“Empezamos con una derrota en Navarra, donde hubo ciertas dudas, pero el equipo se recuperó y logramos ganar siete partidos seguidos”, resume el jugador tinerfeño, que reconoce que “perdimos en un cara o cruz en Granada donde incluso tuvimos el partido controlado, pero después de eso hemos conseguido otras seis victorias consecutivas más y espero que sigamos así. Creo que hemos sido el equipo más regular de la primera vuelta y a falta de dos jornadas ya somos el equipo organizador de la Copa del Príncipe”.

Para Guillén, la holgura con la que se ha impuesto el Canarias en la mayoría de partidos de esta temporada no es fruto de la casualidad, aunque el jugador admite que “tenemos que ser realistas. Hay que percatarse de que en la segunda vuelta tenemos más partidos fuera que en casa. La exigencia a domicilio va a ser mayor, porque vamos a tener partidos del nivel de Lleida e, incluso, de mayor exigencia”.

Trabajo duro

Guillén considera importante “seguir trabajando duro como hasta ahora” ya que, según su punto de vista “tenemos que tener paciencia porque a lo mejor más pronto que tarde nos llega una derrota que iguale la liga mientras los demás ganan. Tenemos que estar preparados por si llega un momento malo”.

El interior aurinegro considera que “no hemos tenido ni un momento malo hasta ahora. Tal vez el más duro haya sido la lesión de Levi o las dudas que pudieron surgir tras la derrota de la primera jornada, pero momentos malos, habrá, como en todas las ligas. Ojalá que no, pero es casi inevitable”, finaliza el tinerfeño.