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Árboles… ¿fuera de ordenación?

Los laureles de indias de la avenida de Anaga que pueden ser trasladados por las obras de la nueva Vía Litoral llevan decenios aportando sombra y oxígeno a la capital. / FRAN PALLERO

ÁNGELES RIOBO | Santa Cruz de Tenerife

El futuro de siete laureles de indias, que desde hace varias décadas aportan oxígeno y sombra a la avenida Francisco La Roche (avenida de Anaga), está en entredicho desde la puesta en marcha de las obras del proyecto de ejecución de la Vía Litoral de Santa Cruz de Tenerife.

La infraestructura creará una vía alternativa que segregará los tráficos de paso: los urbanos y los portuarios. La actuación, que discurrirá desde el barranco de Santos pasando por la avenida Marítima, la vía exterior de la plaza de España y hasta el principio de la avenida de Anaga, precisa del espacio ocupado por estos ejemplares, que, junto a las palmeras, se han convertido en dos de los símbolos vegetales más emblemáticos de las Islas.

El proyecto de la Vía Litoral contemplaba, en sus inicios, un trazado que requería la eliminación de siete laureles. Tras varias manifestaciones vecinales encabezadas principalmente por la plataforma contraria al Plan General de Ordenación de Santa Cruz de Tenerife, en la actualidad, la Vía Litoral contempla un enlace soterrado a la altura del Cabildo insular con incorporación a la avenida de Anaga, a la altura del bar Capricho.

Para la ejecución de la vía en estos términos sigue siendo necesaria la retirada de siete laureles que se localizan al comienzo de la avenida, pero la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias ha considerado acometer un nuevo trazado que requiere el trasplante de los laureles unos diez metros más atrás de su actual ubicación.

Disconformidad

Desde las instituciones responsables aseguran que con esta acción la ciudad ganará 2.000 metros cuadrados, un total de 50.000 frente a los 48.000 del anterior planteamiento. Pero algunos sectores continúan mostrando su disconformidad con el traslado de estos árboles de interés paisajístico y patrimonial, por considerar que se atenta contra su supervivencia. Hace algunas semanas, Sí Se Puede, en la oposición del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, solicitó al alcalde, José Manuel Bermúdez, que el consistorio intercediera por el mantenimiento de los laureles ante la Consejería de Obras Públicas y la comisión, conformada además por el Cabildo tinerfeño y la Autoridad Portuaria de Tenerife.

Tras estudiar las diferentes posibilidades, la Consejería ha dado vía libre a la opción que incluye el trasplante de los laureles unos diez metros más atrás, alternativa que se encuentra en trámite y que celebran desde el consistorio capitalino por considerar que, con ello, Santa Cruz ganará más espacio público. Así lo ha defendido el concejal de Obras y Servicios del Ayuntamiento capitalino Dámaso Arteaga, quien considera que esta opción, “que no supone un coste adicional ni perjuicios para los árboles, aportará a la ciudad una explanada de uso publico atractiva y un estupendo punto de conexión con el mar”.

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Otras opciones

La arquitecta tinerfeña especializada en arquitectura bioclimática y urbanismo sostenible Araceli Reymundo ha brindado sus conocimientos a las instituciones responsables del proyecto, aportando un trazado alternativo para la Vía Litoral, que contempla el mantenimiento de los siete laureles de indias en su actual ubicación. Además, la arquitecta duda de que la operación de mover los árboles de 100 toneladas y 70 metros lineales de raíces no incremente el presupuesto de la acción.

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