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El alcalde quiere que los vecinos decidan el futuro de Los Realejos

G. GULESSERIAN | Los Realejos

Que sean los vecinos de Los Realejos quienes decidan hacia dónde y cómo debe crecer el municipio. Esa es la premisa fundamental del avance del nuevo Plan General de Ordenación (PGO), presentado ayer y que se llevará al pleno del jueves con el objetivo de ser aprobado.

Una vez cumplido este paso y publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), el Ayuntamiento abrirá un proceso de participación ciudadana durante dos meses para que los vecinos puedan presentar sus sugerencias y alegaciones. “Algo a lo que el grupo de gobierno no está obligado pero que consideramos fundamental”, apuntó en rueda de prensa el alcalde, Manuel Domínguez, quien estuvo acompañado por el concejal de Urbanismo, Francisco González.

Esta es quizás la tarea “más larga y difícil” porque cada una de ellas se estudiará de manera individual y se les intentará dar respuesta con el propósito de que el documento reciba la aprobación inicial y provisional, para luego ser enviado a la Cotmac. Una vez que ésta se pronuncie respecto al mismo se hará de manera definitiva.

Un largo camino

“Nos queda un largo camino”, subrayó Domínguez, y para ello invitó a ciudadanos, asociaciones y a las diferentes formaciones políticas “a que caminen de la mano para conseguir Los Realejos que queremos”.

El documento, cuya última revisión data de 2004, constituye una foto fija foto fija de cómo se encuentra la localidad norteña e incluye una serie de fichas por parcelas donde se distinguen entre terrenos ya urbanizados, urbanos sin construir y otros dotacionales, para que la población tenga la oportunidad de apuntar posibilidades de uso. No obstante, subrayó el alcalde, “el deporte deberá ser una pieza fundamental dado que la promoción de Los Realejos como atractivo turístico, complementario a un núcleo receptivo como Puerto de la Cruz, podría ir definiendo el planeamiento urbanístico de la ciudad”.

Apuesta firme

En este sentido, manifestó que en el modelo que plantea el grupo de gobierno “hay sitio para el hipódromo y un campo de golf”, pero puntualizó que será la iniciativa privada quien marcará “el ritmo” de ambas instalaciones y dirá si es sostenible o no su construcción.

Aunque Domínguez aclaró que “si los ciudadanos no los quieren, éstos proyectos no se podrán desarrollar”, subrayó que “el apoyo que ha tenido el Partido Popular (PP) en las últimas elecciones no ha sido a una persona en concreto sino a un programa electoral que tiene como eje el hipódromo”. Por lo tanto, se mostró convencido de que esta iniciativa “será una de las apuestas firmes de los ciudadanos”.

La idea es tener el documento aprobado de forma definitiva en el plazo de dos o tres años, es decir, antes de culminar el mandato. “Intentaremos seguir diligentes y no perdermos para cumplir este objetivo”, prometió.