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El Cabildo no puede ser la mayor empresa de Canarias > Antonio Alarcó

Nos hubiera gustado, y lo decimos sinceramente, haber apoyado los presupuestos del Cabildo Insular de Tenerife, pues somos partidarios de los grandes consensos y esto se demuestra, entre otras cosas, apreciando que cada una de las mociones que hemos propuesto en Pleno -como han hecho los demás grupos políticos-, han sido adoptadas unánimemente, adquiriendo carácter institucional. El Pleno en que se aprueban los presupuestos es el más importante del año, pues esboza las principales líneas de actuación del ejercicio siguiente, y obligatoriamente debería hacer pedagogía en un momento de crisis.

El grupo de gobierno mantiene para 2012 el Cabildo más caro de la Historia en las peores circunstancias para los tinerfeños, sin reducir el coste de su entramado de entidades públicas ni el número de consejeros liberados. Lo dijimos en rueda de prensa y lo mantenemos: son unas cuentas irreales y decepcionantes que no responden a las necesidades de los ciudadanos y de la Isla de Tenerife, que el propio informe de Intervención del Cabildo desautoriza por consolidar a la mayor empresa de Canarias, haciendo recaer su sostenimiento en una subida de precios públicos generalizada. El presupuesto se reduce en un 1,7% con respecto al año 2011 y se prevé un incremento en los ingresos corrientes en 21 millones de euros. Se entiende que el gasto crece en 10,7 millones, lo que supone un 3% más, sin indicarnos de dónde saldrá ese dinero.
Nos afeó el grupo de gobierno durante la exposición de nuestra enmienda a la totalidad que dijéramos que la Corporación Insular había armado una suerte de “cabildo paralelo” que tendríamos que reducir.

Donde ellos ven con orgullo una especie de agencia de colocación de empleo, para el Partido Popular este entramado de empresas públicas, organismos y fundaciones produce una intolerable competencia desleal con la iniciativa privada que está generando un gasto estructural innecesario de 139 millones de euros, el 27% de los ingresos totales.

Un ente externo está realizando un estudio de reestructuración del sector público empresarial cuya entrega se ha retrasado demasiados meses, y que no se encargó, como hubiera sido deseable, a los eficientes y formados funcionarios con que cuenta el Cabildo Insular, cuyo trabajo es exquisito, independientemente de que no estemos de acuerdo con su dirección política. En nuestra opinión, lo más prudente hubiera sido esperar al resultado de dicho estudio, esencial de cara a la elaboración de estos presupuestos, y desde luego, lo que no haya de gestionar el Cabildo ha de corresponder a la sociedad civil.

Finalmente existen redundancias y duplicidades entre las áreas de gobierno, y algunos organismos y empresas que aumentan los gastos de personal y de funcionamiento. Todo ello con 22 consejeros liberados, cuando Mariano Rajoy ha reducido el organigrama del Gobierno de España y apenas cuenta con 13 ministros para dirigir todo un país.

No sabemos qué pretendía el pacto CC-PSOE al traer este asunto al último Pleno del año, sin tiempo ni margen de maniobra alguno, y hurtando este asunto del debate público y en medios de comunicación.

A estas alturas solo Carlos Alonso, consejero del Cabildo de Tenerife que tuvo responsabilidades de gobierno con el Partido Popular, parece vivir en otro mundo, y ha escrito una Carta -de muy dudosa gramática- a los Reyes en la que pregunta por la Voz de Tenerife. ¿Ahora o siempre? ¿Qué ha pasado en los últimos siete años? Nosotros tenemos muy claro lo que representamos.

Pese a nuestro voto en contra al presupuesto logramos sacar por unanimidad un Fondo Insular de Cooperación Municipal, con ámbito temporal de cuatro años, como máximo órgano de representación municipal de la Isla, con el fin de que sea un instrumento importante desde el punto de vista de generación de empleo.

Nuestra obligación es ejercer esta oposición responsable de la que siempre hablamos. Estamos abiertos al diálogo para buscar soluciones para Tenerife, pues con ese objetivo nos presentamos a los ciudadanos, a pesar de los medios precarios con que ejercemos nuestra actividad, de forma injustificada e injustificable.

Ya decimos que hubiésemos querido dar nuestro voto favorable, si bien somos conscientes de que la prórroga de los Presupuestos Generales del Estado, que serán revisados en marzo -ya que el Gobierno de Zapatero no cumplió como debía haber hecho-, hará necesario que se estudien de nuevo las cuentas de la Isla, y seguro que a mejor.
Siempre comprometidos con las necesidades de los ciudadanos..

Antonio Alarcó es Portavoz del Grupo Popular en el Cabildo de Tenerife y senador por la Isla