EFE | Las Palmas de Gran Canaria
Los trabajadores de la compañía Spanair en Canarias, que suman 160, se concentrarán este lunes en los aeropuertos de Gran Canaria y Tenerife Norte, según ha informado a Efe Juan Miguel Suárez Santana, de la Secretaría Acción Sindical de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO.
Estas concentraciones se llevarán a cabo en otros aeropuertos españoles, según ha indicado Suárez, quien ha explicado que el objetivo de la protesta es denunciar la situación en la que se encuentran, que es de permiso retribuido, si bien se temen que no les paguen los salarios correspondientes al mes de enero.
La situación de permiso retribuido les fue dado a conocer la madrugada del pasado sábado y ello conllevó a desistir del encierro que habían anunciado en el aeropuerto de Gran Canaria, donde retomarán mañana su protesta para tratar de que se aclare su situación cuanto antes, ha señalado Suárez. Los trabajadores temen que el “poco” dinero “que hay en caja sea derivado a otros menesteres”.
El representante sindical ha explicado que aunque la empresa sigue pagando la seguridad social de los trabajadores hasta que se produzca la extinción laboral, no podrán cobrar las prestaciones por desempleo hasta que lo decida la justicia, una vez que la empresa presente el concurso de acreedores como ha anunciado y se resuelva entonces la extinción de sus contratos.
Ello significa que podrían estar varios meses sin cobrar como ha ocurrido con otras compañías aéreas, ha señalado Suárez, quien además ha manifestado que produce “un poco de risa” el expediente sancionador anunciado por el Ministerio de Fomento y que podría ascender a 9 millones de euros “porque la compañía no tiene nada”.
Spanair apenas tiene activos, los aviones no son de su propiedad, salvo uno, por lo que ha apuntado que no podrá hacer frente a sus acreedores, según la información de la que dispone Suárez.
El representante sindical ha señalado que la decisión de Spanair de paralizar la actividad es “inadmisible” e ilegal porque supone un “cierre patronal”, y que los trabajadores no se esperaban esta forma de proceder aunque conocían la situación económica “delicada” que atravesaba Spanair.
La empresa prestaba un servicio público y se deben dirimir responsabilidades porque organismos públicos, en alusión a la Generalitat y al Ayuntamiento de Barcelona, “han depositado muchos millones de euros” en ella.
Con las protestas anunciadas no se pretende hacer “más daño ni al pasaje ni a los trabajadores”, que ha cifrado en 1.500 los directos en todo el Estado, y 160 en Canarias, sino exigir a la administración pública que “ordene” este tipo de situaciones.
“La forma en que han dejado caer compañía” no se puede permitir y el argumento esgrimido de que se ha hecho de ese modo por seguridad de los pasajeros “es un insulto a la inteligencia”.