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Otro tipo de pareja


REBECA DÍAZ-BERNARDO
| Santa Cruz

Suavizando un poco la definición del diccionario Merriam-Webster, un ‘boy toy’ es un hombre joven y guapete, poco brillante intelectualmente, que suele salir y citarse con mujeres más mayores, que únicamente le quieren para una relación esporádica, sea sexual o romántica.

Digo lo de suavizando porque en casa de Menchu se ha desatado el escándalo y no vamos a enjuiciar a nadie: la tía Julia, de 61 años, volvió a casa por Navidad acompañada de un señor de treinta y pocos. Y por mucho que la tía Julia esté fenomenal física y mentalmente, yo soy de las que firmo por estar como ella a su edad porque va a nadar a diario a una piscina y hace Pilates y lleva sus mini dosis de colágeno con mucho estilo; es evidente que cuando paseó por Santa Cruz del brazo de su chico todo el mundo pensó que acompañaba a su hijo por muy moderna que ella se vista o parezca, y cuando se encontraban con alguien conocido por la calle y le presentaba al muchacho diciendo que era su pareja, más de uno (y de una) la intentaron mirar desde arriba.

Quise saber más de este tipo de relaciones donde hay una gran diferencia de edad; creo que Julia casi dobla la de su novio, y encontré varias opiniones expertas que generalizan asegurando que en estas parejas la atracción tiene que ver con necesidades psicológicas no resueltas y que lo fundamental no va ligado a lo físico o al sexo, sino a la personalidad, la sabiduría y al poder que simboliza una persona con experiencia, la de más edad, pero precisamente acerca de uniones entre mujeres mayores con hombres jóvenes realmente hay muy poca bibliografía, porque sigue siendo mal mirado y aunque cada vez se dan con mayor frecuencia, ellas continúan manteniendo a sus amantes en la clandestinidad y no se atreven a sacarlos a la luz porque sienten vergüenza y culpa frente a sus hijos, su familia y la sociedad en general.

Y es que si pensamos en esas necesidades no resueltas, por ejemplo mujeres que han tenido una carencia paterna importante durante su infancia tienden a buscar hombres mayores que proyecten protección y seguridad, cuando un hombre joven se siente atraído por mujeres mayores es porque busca una imagen materna: relaciones edípicas en la que ellos sienten que es más cómodo que una mujer les dirija la vida. Pero claro, luego se acuestan juntos, tienen sexo, y eso a una madre con hijos adultos le puede costar bastante asumirlo y, sobre todo, darlo a conocer. En general los pronósticos de los especialistas no son muy positivos para estas parejas, ya que señalan que se trata de relaciones transitorias, siendo pocas las que llegan a envejecer juntas, esto es obvio, pero por lo visto no duran mucho más de cinco años que es el período tras el cual parece ser que cualquier relación tiende a quebrarse o a consolidarse, y estos mismos expertos aseguran que cuanta mayor es la diferencia de edad, más difícil será que la relación dure porque tarde o temprano el más joven buscará un compañero o compañera de su misma generación. Ahora que, mientras dure y sea feliz, olé por la tía Julia y que le quiten lo bailado.

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