EUROPA PRESS | Oviedo
La Fiscalía del Principado de Asturias solicita una pena de dos años y seis meses de prisión para un vecino de Oviedo, F. O. G., nacido en 1974, al que se acusa de un delito de corrupción de menores del artículo 189.1 b) del Código Penal, por presuntamente descargar y compartir, a través del programa ‘Emule’ vídeos con contenido de pornografía infantil.
Junto a la pena de prisión, se le pide inhabilitación especial para el ejercicio de cualquier empleo o cargo público, profesión u oficio relacionado con menores, durante el tiempo de la condena. La vista oral está señalada el próximo lunes, día 30 de enero de 2012, en el Juzgado de lo Penal número dos de Oviedo, a las 11,45 horas.
Según explica la Fiscalía, en el curso de las actuaciones policiales practicadas por la Brigada de Investigación Tecnológica del Cuerpo Nacional de Policía en Madrid, se recibió en el Grupo 2 de Protección al Menor una comunicación procedente de Interpol Wiesbaden, en la que la policía alemana informaba de la existencia de una serie de usuarios de Internet, que utilizando la red de intercambio de archivos P2P “eDonkey”, mediante el uso del programa cliente eMule 2.12, estaban procediendo a la distribución de dos archivos de vídeo, en los que se podía observar a menores de edad teniendo relaciones sexuales con adultos.
A consecuencia de dicha información, según la versión de la Fiscalía, el Grupo 2 de Protección al Menor seleccionó a los usuarios españoles que poseían completamente descargado y compartían con otros usuarios los archivos de vídeo investigados (con un nombre que aludía de forma específica a material pornográfico infantil).
De esta forma, se localizó a un usuario que el día 16 de septiembre de 2008, a las 16,44 horas descargó uno de los archivos. Tras obtenerse el correspondiente mandamiento judicial se consiguió saber que la titular de la línea era una mujer domiciliada en Oviedo, desde cuya vivienda se habían distribuido vídeos de contenido pornográfico infantil.
El Juzgado de Instrucción número 33 de Madrid autorizó la entrada y registro en el domicilio el 15 de junio de 2009. Así, sobre las 12,55 horas se ocuparon, entre otros materiales, dos ordenadores, uno de sobremesa que estaba encendido, y otro portátil que estaba apagado. En el registro estuvo presente el acusado, que resultó ser el usuario de esos equipos. En esos momentos estaba compartiendo, a través de la aplicación eMule, archivos de contenido pedófilos.
Igualmente se comprobó que el acusado, utilizando la aplicación eMule, había descargado y compartido gran cantidad de archivos con nombres que hacían alusión a pornografía infantil. Igualmente se comprobó que el acusado había utilizado la aplicación eMule para buscara archivos que contuvieran en su nombre la palabra “PHTC”, que son las siglas de las palabras inglesas “Preteen HardCore”, que son las utilizadas para nombrar archivos en los que aparecen preadolescentes manteniendo relaciones sexuales.