va por el aire> Benito Cabrera

Carnaval > Benito Cabrera

Herencia de las saturnales y lupercales romanas, el Carnaval es época de subversión de normas establecidas y una fiesta que se celebra en muchas partes del mundo occidental.
Fueron los españoles y portugueses los que exportaron el complejo ritual carnavalesco a América, donde se festeja con especial intensidad y riqueza en algunos países.
Aunque de primigenio origen pagano, el Carnaval está ligado al ciclo católico. Los protestantes usualmente no lo celebran, o -como en el caso danés- han modificado y adaptado sus esquemas básicos. Tránsito entre la Navidad y la Cuaresma, en Canarias antiguamente se celebraba ya desde el mes de enero.
Así lo atestiguan diversas referencias como la de José de Olivera que, a mediados del siglo XIX, narra los bailes que se celebraban desde el 17 de enero en la lagunera sociedad El Porvenir. Asimismo, eran habituales las mascaradas, que tenían lugar en Navidad y en la Candelaria, el 2 de febrero.
La fiesta tradicional e histórica está llena de manifestaciones que poco tienen que ver con el concepto actual del Carnaval. El historiador Manuel Hernández nos cuenta de la celebración de los llamados bailes de Compadres y Comadres, los jueves anteriores al martes de Carnaval.
Por otra parte, Domingo J. Navarro narra cómo en Gran Canaria se divertían tirando huevos de talco, jeringazos de agua sucia, bailando malagueñas y folías y comiendo adobo y arroz con leche.
Curiosamente, la forma actual isleña, abocada a los actos organizados desde las instituciones (elección de reinas, concursos, etcétera) se dejó influenciar con el tiempo con las adaptaciones sudamericanas, de tal suerte que el nuestro es más un Carnaval de tintes caribeños, andaluces y brasileros de lo que fuera en otras épocas.
En próximas entregas nos dedicaremos a algunas de las antiguas tradiciones, muchas de ellas ya extintas, del Carnaval canario.