FRAN DOMÍNGUEZ | Santa Cruz de Tenerife
El edificio Neurocog ya es una realidad. Integrado en pleno Campus de Guajara de la Universidad de La Laguna (ULL), este recinto, de apenas 286 metros cuadrados de superficie y construido en ocho meses, aglutina el proyecto Neurocog, destinado a estudiar la actividad cerebral con el fin de ampliar las bases neurológicas de la mente humana. De este modo, los 65 investigadores de las dos universidades canarias adscritos a esta iniciativa, uno de los proyectos estructurantes (investigaciones en sectores considerados claves para el Archipiélago) promovidos por la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (Aciisi), en colaboración con los centros públicos de enseñanza superior, dispondrán de un lugar desde el que coordinar sus estudios en el ámbito de la neurociencia.
El recinto, diseñado por la Oficina Técnica de la propia ULL, reúne un equipamiento avanzado compuesto por sistemas de registros de movimientos oculares, de electrofisiología cerebral y de estimulación magnética transcraneal, entre otras herramientas científicas que servirán para desarrollar diferentes líneas de investigación, que van desde el análisis de las disfunciones motoras y cognitivas en pacientes cerebrales, el estudio neurológico y cognitivo, y el examen de las funciones cerebrales y emocionales de la adolescencia; hasta el desarrollo de programas dirigidos a personas con trastornos de ansiedad y fobias, y la valoración de los procesos cerebrales del lenguaje. “El proyecto Neurocog ya lleva más de un año en funcionamiento con más de 50 especialistas de diversas disciplinas, entre ellos, jóvenes investigadores posdoctorales. Este centro, que los coordinará a todos, no es un gasto, sino una inversión. Es un ejemplo de cómo el dinero en infraestructuras en tiempos de crisis económica se puede aprovechar con racionalidad y mesura”, subrayó el rector de la ULL, Eduardo Doménech, durante el acto de inauguración del recinto, al que asistieron el director de la Aciisi, Juan Ruiz Alzola, y el responsable del proyecto Neurocog, Manuel de Vega. Alzola, ante los diversos representantes de la comunidad universitaria allí congregados, quiso resaltar en la gestación del Neurocog la labor de Andrea Brito, otrora coordinadora de los proyectos estructurantes de la Aciisi.
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“Menos cachivaches y más estabilidad”
En el acto oficial de apertura de estas instalaciones, Manuel de Vega, director del proyecto Neurocog, aprovechó para abogar por la tarea y el entusiasmo desempeñado por los jóvenes investigadores, parte fundamental en iniciativas como ésta, enmarcadas también en la estrategia del Campus Atlántico Tricontinental. De Vega resaltó que hay nueve jóvenes investigadores posdoctorales trabajando en el Neurocog y remarcó la imperante necesidad de consolidar sus puestos. “Se trata de uno de los desafíos para poder progresar en nuestros objetivos”, detalló. El responsable del Neurocog comentó que a veces es preferible tener “menos cachivaches” (en relación a los equipamientos técnicos) siempre que se dé más estabilidad laboral a los jóvenes investigadores. El edificio Neurocog servirá, entre otras acciones, para indagar en enfermedades como el párkinson o el alzhéimer.
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