MEGÁFONO > LA GALGA (III)

La Sociedad Unión Galguera, un espacio para el encuentro

DAVID SANZ | Puntallana

El 3 de junio de 1933, en plena II República, nacía la Sociedad Instrucción y de Recreo Unión Galguera que, salvando el paréntesis de la Guerra Civil, ha sido uno de los ejes de la vida social de La Galga. Esta sociedad, una de las tres de esta naturaleza que perviven en la Isla, está presidida desde hace dos años por José López Hernández, natural de este barrio, que de pequeño, como tantos otros palmeros, marchó a Venezuela, de donde regresó hace casi una década.

“La Galga tiene algo que nos llama mucho no sólo a los que nacimos aquí sino a los de fuera; yo tengo dos hijos que nacieron en Venezuela y hoy no hay quien los saque de aquí”, nos comenta el presidente de la Sociedad, para quien el secreto de este atractivo reside “en el espíritu de unidad que tenemos, siempre pendientes de colaborar o ayudar a los otros, que quizá no se ve en otros pueblos”. “Es una de las cosas que te enganchan, porque, por ejemplo, si estás cavando papas o podando la viña y llegan amigos, se ponen a ayudarte”.

Ese espíritu colectivo es el que se respira también en la Sociedad, donde ya hay socios de cuarta generación. “Esto es nuestra historia y no la podemos abandonar”, comenta López Hernández, cuyo abuelo, padre y ahora su hijo han sido socios.

En la actualidad Unión Galguera cuenta con 117 socios y allí se reúnen vecinos para echar la partida de dominó, jugar un billar o, sencillamente, departir sobre la marcha de la vida. La Unión Galguera también es un motivo de “orgullo”, como lo reconoce su presidente, quien recalca el hecho de que gente de otros pueblos se acercan hasta la Sociedad para disfrutar de este ambiente tan singular.

[apunte]

Admiten mujeres desde hace dos años

Los tiempos cambian y las entidades tienen que evolucionar con ellos. Por esta razón, la sociedad Unión Galguera desde hace dos años tomó la decisión de admitir a las mujeres. Hasta entonces era un privilegio reservado a los hombres. Hoy ya hay inscritas siete mujeres, según nos informó el presidente, José López Hernández.

Detrás de esta decisión de la sociedad también hay un motivo práctico, dado que las instituciones donde se produzca cualquier tipo de discriminación (como en este caso ocurría con las mujeres) no pueden acudir a las ayudas públicas para desarrollar sus actividades. Para ello han sometido a revisión los estatutos de la institución, que ya han sido trasladados al Gobierno de Canarias para que le dé su aprobación definitiva. La Unión Galguera dispone de una sede alquilada, que cuenta con dos salones y una pequeña cantina. “Nuestro sueño sería tener un local propio”, comenta el presidente de la institución, quien indicó que en la actualidad el socio paga al año 40 euros, “lo que prácticamente da para pagar el alquiler”.

Como fecha señalada en el calendario de la Unión Galguera está el dos de junio, la víspera de la fundación, cuando se pone sobre la mesa la importante cultura vitivinícola del pueblo. Una gran cata reúne a unos cincuenta vinos diferentes, de los que alrededor de 48 son de La Galga.

[/apunte]