EFE | Almería

La Guardia Civil ha detenido en Aguadulce (Almería) a tres jóvenes como presuntos autores de un delito contra la salud pública, que publicitaban “porros buenos y baratos” en un plano pintado con aerosol en el suelo de un parque, en el que figuraba un teléfono móvil y el modo de llegar al punto de venta.

Los agentes obtuvieron este “sorprendente hallazgo” en sus pesquisas en torno a un parque cercano a un instituto de la localidad almeriense en el que varios jóvenes, entre ellos menores, se reunían con frecuencia para consumir cannabis, ha informado la Comandancia de Almería en un comunicado.

Como resultado de la investigación fueron imputados un jóven de 19 años y un menor de 16, que facilitaba sustancias estupefacientes a sus compañeros de estudio.

Al realizar la inspección del parque cercano al centro de enseñanza, punto de reunión para el consumo del hachís, los agentes localizaron un plano, dibujado en el suelo con aerosol, que indicaba cómo llegar al punto de venta de la droga y en el que se publicitaban “porros buenos y baratos”.

En el mismo, figuraba el sobrenombre del proveedor y un número de teléfono móvil para realizar pedidos.

La investigación en torno al domicilio permitió a los agentes constatar un flujo continuo e inusual de personas no residentes en la zona, algunas de ellas conocidos consumidores de estupefacientes.

La identificación de varias de estas personas permitió comprobar que portaban pequeñas cantidades de estupefacientes, que reconocían que habían adquirido en el domicilio investigado.

Los investigadores constataron un aumento de la actividad del punto de venta en las últimas fechas, “posiblemente debido a la campaña publicitaria que había llevado a cabo su responsable”.

Los agentes procedieron el pasado 16 de febrero al registro del domicilio, en el que intervinieron 122 gramos de polen de hachís, fragmentados y preparados para su distribución y venta, 160 euros en efectivo y un arma corta simulada, y detuvieron a M M., de 24 años, M.A., de 33, y N. E. B., de 28, todos ellos vecinos de Roquetas de Mar (Almería).

Los detenidos pasaron a disposición judicial del Juzgado de Instrucción número 5 de Roquetas de Mar, cuyo titular decretó el ingreso en prisión de M.M.