SANIDAD>

UGT se plantea demandar al Servicio Canario de Salud

Europa Press | Las Palmas de Gran Canaria

La Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT Canarias junto con los servicios jurídicos del sindicato están estudiando presentar una demanda de tutela de libertad sindical contra el Servicio Canario de Salud, por no haberse negociado en la Mesa Sectorial de Sanidad la forma de implantar el aumento de la jornada laboral de 35 horas a la semana a 37,20 tanto en Atención Primaria como en Especializada, informó el sindicato en un comunicado.

De esta manera, la secretaria de FSP UGT en Fuerteventura, Ana Francés, aseguró que esta isla menor se ha impuesto esta medida, ya que no ha habido negociación ni flexibilidad, y solicitan a la gerente del Área de Salud, Susana Barbosa, que elabore una programación de turnos establecidos durante todo el año, para que los trabajadores del Servicio Canario de Salud puedan organizarse, sobre todo en Atención Primaria, donde se ha creado una bolsa de incidencias que establece los turnos y horarios de un día para otro.

Por otro lado, estimó que esta medida de aumento de jornada laboral con la que la consejera de Sanidad, Brígida Mendoza, pretende respetar la plantilla orgánica al completo, va a forzar que se prescinda de más mil trabajadores del Servicio Canario de Salud, tanto personal sanitario como no sanitario, que venía contratándose como personal eventual para cubrir sustituciones y demás incidencias.

“UGT considera que esta estrategia tendrá consecuencias graves, por un lado obligar al personal a doblar, con lo cual disminuye la calidad del servicio de atención al paciente, y por otro la destrucción de empleo en Canarias, Comunidad Autónoma que registra el mayor paro en Europa”, dijo.

En este sentido, señaló que este aumento de número de horas en la jornada laboral “conlleva ciertamente un incremento de la producción, como dice la consejera de Sanidad, pero a un precio muy elevado: haciendo doblar horario a todos los trabajadores para cubrir todas las ausencias que se produzcan durante todo el año, y dejando en el paro a un millar de profesionales”.

“Al final, como siempre, el servicio de atención al paciente se verá afectado y disminuirá, más todavía, la calidad de la Sanidad en Canarias”, concluyó.