Una exposición en TEA explora lo ambiguo del sujeto

Oliver Behrman recrea la estética 'glam' en una instalación. / DA

SANTIAGO TOSTE | Santa Cruz de Tenerife

La feminidad absoluta es una mascarada; la masculinidad absoluta es una farsa. Ése es el hilo conductor de Juego de máscaras. La identidad como ficción, la exposición que se instaló ayer en TEA Tenerife Espacio de las Artes y que, tomando como pórtico de entrada la celebración del Carnaval, reúne más de medio centenar de propuestas basadas en la transgresión de los roles sexuales: pinturas, fotografías, vídeos e instalaciones. Así lo explicaron ayer el director insular de Cultura y Patrimonio Histórico, Cristóbal de la Rosa, y la responsable del Departamento de Exposiciones Temporales del recinto, Yolanda Peralta.

En Juego de máscaras, que puede visitarse hasta el 17 de junio, se dan cita polaroids de Andy Warhol; autorretratos de Sarah Lucas y Cindy Sherman; una videocreación de Martín Sastre; fotografías de Jorge Ribalta y Douglas Gordon o un trabajo de Cabello y Carceller, cedido por el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM).

Y junto a esto conviven además obras de Ana Laura Alaéz, Manu Arregui, Yamusa Morimura, Valerie Belin, Patricia y Marie-France Martin, Christian Stromholm, Pedro Meyer, Joel-Peter Witkin, Julia Galán, Pierre Moliner y Meritxel Santos. Lo mismo que las obras creadas o cedidas para la ocasión por Laura Gherardi, Ro.Ro., Martín y Sicilia, Chris Hotz, Cristóbal Tabares, Encarneviva y Yapci Ramos.

La instalación donde Oliver Behrmann recrea la atmósfera del glam-rock, o las imágenes antiguas del Carnaval del Centro de Fotografía Isla de Tenerife y la Fedac del Cabildo grancanario, completan este sugerente viaje.