AGENCIAS| Palma

La comparecencia de Iñaki Urdangarin como imputado por su gestión al frente del Instituto Nóos y el supuesto desvío de dinero público para sustraerlo al control del fisco será seguida por sesenta abogados, entre acusaciones y defensas, que acudirán in situ a un interrogatorio, que se prevé largo y prolijo.

Se trata de la primera vez que un miembro de la familia real tiene que responder ante un juez de acusaciones formuladas en su contra. El duque de Palma hablará para defenderse por primera vez de las acusaciones que pesan sobre él, envuelto en una expectación mediática sin precedentes. Se han acreditado un total de 140 periodistas, incluidos los de la televisión árabe Al Yazira.

Urdangarin deberá dar cuenta ante el magistrado que investiga el caso Palma Arena, José Castro, de los convenios y contratos suscritos con las administraciones de Baleares y Valencia cuando era el responsable del Instituto Nóos. Y hay un segundo capítulo,no menos importante que el primero, y es el relativo al supuesto desvío hacia paraísos fiscales de al menos una parte de ese dinero público de ambas comunidades. La Fiscalía Anticorrupción considera que alrededor de 3 millones de euros del total de 5,8 millones recibidos entre el 2004 y el 2007 pudieron tener dicho destino.

El juez José Castro y los fiscales Juan Carrau y Pedro Horrach pretenden corroborar los datos aportados hasta ahora por otros imputados y testigos respecto a las reuniones en que se habrían fraguado los acuerdos con los respectivos gobiernos. Urdangarin, por tanto, deberá explicar con quién se reunió, en qué momento y en qué condiciones pactaron las colaboraciones. Además, deberá explicar dónde iba a parar el dinero ingresado, después de que se hayan detectado salidas de centenares de miles de euros a cuentas en el extranjero.

La creación de una estructura societaria dedicada, supuestamente, a desviar los fondos obtenidos al Reino Unido y de allí a Belice, mediante sociedades pantalla, centrará una parte del interrogatorio. Los fiscales tienen indicios que implican al duque de Palma con estas entidades, entre ellos documentos con el supuesto recorrido del dinero, incautados en los registros de noviembre último en Barcelona y en el que aparecen las iniciales IU, que se corresponden con las de su nombre y apellido.

Dos de los imputados han apuntado que el duque de Palma y su ex socio en el Instituto Nóos, Diego Torres les encargaron la creación de sociedades en el extranjero para ampliar las actividades de sus empresas y reducir el pago de impuestos. El que fuera contable y asesor fiscal de Nóos, Miguel Tejeiro, y el responsable de crear las sociedades en el extranjero, el abogado Salvador Trinxet, han matizado, sin embargo, que quien coordinó todos los movimientos fue Torres.

De las preguntas efectuadas hasta ahora en los interrogatorios cabe desprender que el juez Castro preguntará hoy a Urdangarin por la utilización de su posición social como plataforma para sus negocios. De las declaraciones de los implicados se desprende que el duque llevó personalmente algunas operaciones como la de intermediar para que el Govern balear patrocinara el equipo ciclista Banesto, por la cual pidió 300.000 euros.

Los abogados del sindicato ultraderechista Manos Limpias han insistido en los interrogatorios precedentes en preguntar por el grado de participación que hubiera podido tener en la gestión de Nóos la Infanta Cristina. El juez se ha dirigido a todas las partes para conocer su criterio sobre su eventual citación como imputada. Manos Limpias, por otra parte, tiene previsto solicitar medidas cautelares con respecto a Urdangarin. El juez cuenta con que se le pida que imponga al duque de Palma una fianza para hacer frente a sus posibles responsabilidades civiles. Pero fuentes jurídicas aseguran que Manos Limpias irá más lejos y pedirá que Urdangarin no pueda salir de España sin permiso judicial. A todo ello tendría que responder el juez con un auto razonado.

Podría entrar en coche, como medida de seguridad, pero él prefiere caminando

El duque de Palma, Iñaki Urdangarin, entrará este sábado por “estrictas razones de seguridad” en coche, y no a pie como es habitual, a los juzgados de la capital balear para declarar como imputado en una pieza separada del caso Palma Arena.

El Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) ha informado esta tarde en un comunicado de que el juez decano de Palma, Francisco Martínez Espinosa, ha adoptado esta decisión “con carácter excepcional” y tras valorar los requerimientos de seguridad planteados desde la Jefatura Superior de Policía de Baleares.

A pesar de que en principio el juez decano había decidido no hacer pública su decisión hasta una hora antes de la declaración de Urdangarin -prevista a las 9:00 horas del sábado- finalmente ha cambiado de opinión y ha decidido difundirlo esta tarde, han indicado a Efe fuentes del TSJIB.

Las mismas fuentes han apuntado que Martínez Espinosa ya ha comunicado su decisión a la Policía Nacional, encargada del dispositivo de seguridad montado con ocasión de la declaración judicial del duque en el caso Palma Arena de supuesta corrupción.

La incógnita de la entrada de Urdangarin por la puerta trasera de los juzgados de Palma se ha mantenido hasta esta tarde, después de que ayer la Policía enviara al juez decano una carta recomendando que se hiciera en coche, y no andando, por seguridad.

De esta manera, se aplicará al duque de Palma una excepción de la que no goza el resto de imputados, que acceden siempre a pie desde la calle hasta la puerta de los juzgados bajando por una rampa y recorriendo unos 35 metros hasta la entrada.

Hasta hoy, el juez decano había mantenido la postura de aplicar a todos los imputados, incluido Urdangarin, la regla general de que el acceso al edificio judicial por la parte trasera se hiciera a pie.