DAVID SANZ | El Paso

El paraje de Mendo, que alberga el vertedero y los antiguos hornos incineradores de residuos, está asistiendo a un proceso de regeneración para recuperar su valor ambiental original. Una recuperación que ya se ha iniciado con el desmonte de las antiguas instalaciones, después de su cierre siete años atrás.

Si bien el Cabildo ha ordenado la detención de estas obras para tratar de aprovechar alguna de las construcciones existentes y amoldarla al programa ambiental previsto en la zona para el futuro y que incluye la creación de un aula de la naturaleza. La presidenta del Cabildo, Guadalupe González Taño, indicó que la futura aula ambiental de Mendo “podría permitir la realización de una serie de actividades como la observación astronómica de aficionados y el parapente, entre otras”. De ahí que desde la Corporación insular hayan decidido suspender la idea original que “era echar todos lo que estaba edificado abajo para no tener que hacer dos veces lo mismo”, subrayó la presidenta, quien recordó además que “estos espacios muy degradados tardan mucho tiempo en recuperarse ambientalmente”.

Recuperación

Al parecer, la zona de Mendo reúne las condiciones ideales para la práctica de ambas actividades, por la altura y orientación, además de encontrarse muy retirada de cualquier núcleo poblacional.

Las recuperación de este espacio, situado en el municipio de El Paso, pasa por el saneamiento completo de la masa de residuos y la instalación de un revestimiento impermeable. Para facilitar que renazca la revegetación en los taludes afectados, también se contempla la plantación de especies vegetales autóctonas características de la zona y existentes en el entorno de las actuales instalaciones. En cuanto a la demolición de los edificios, que era otra de las condiciones acordadas en el proyecto, ha quedado suspendida dada su más que probable reutilización.