Cerca de tres mil vecinos respaldaron una iniciativa que se celebró este domingo sin incidentes. / FOTOS: SERGIO MÉNDEZ

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Santa Cruz sobre ruedas tiene tanto futuro que no es descartable que se apruebe en la Junta de Gobierno que el Ayuntamiento de santa Cruz de Tenerife tiene prevista para este lunes.

Así se desprende del éxito registrado en la experiencia piloto celebrada ayer, donde cerca de tres mil vecinos de la capital tinerfeña se lanzaron a esta singular reconquista del asfalto para las actividades no contaminantes.

Además, la ausencia de incidentes y, por qué no decirlo, el hecho de que el propio alcalde, José Manuel Bermúdez, se apunta siempre que puede a este tipo de actividades -el domingo no fue una excepción- inclinan la balanza hacia un proyecto que haya su matriz en cada Día de la Bicicleta celebrado con el mismo formato.

Santa Cruz sobre ruedas pasa por cerrar al tráfico automovilístico un carril de la autovía que circula desde la avenida de Francisco La Roche (la popular avenida de Anaga) hasta San Andrés durante varias horas en la mañana del domingo. Los beneficiados, tal y como se comprobó en el día de ayer, son un heterogéneo grupo de ciudadanos a los que les place circular en bicicleta, patines y otros artilugios similares, a los que hay que sumar a los eternos amantes del jogging.

Desde luego, el tráfico no se resintió, aunque el equipo de gobierno municipal es consciente de que entre mayo y septiembre es inviable la iniciativa. Por eso, precisamente, es posible que se apruebe desde este mismo lunes o que, al menos, se estudie en la junta de Gobierno.

Pero durante el resto del año y dada la empinada orografía de esta capital, Santa Cruz sobre ruedas es la respuesta a muchos que, domingo a domingo, circulan por las aceras -cuando las hay- camino de una playa que se encuentra a siete kilómetros de distancia.

Y por adeptos no fracasará esta reconquista del asfalto.