Fotos: Javier Ganivet

ÁNGELES RIOBO| Santa Cruz de Tenerife

No solo es una de las voces más importantes de Canarias en el Congreso de los Diputados y exalcaldesa emblemática de la ciudad de Aguere… Resulta que Ana Oramas es también una de las mejores difusoras de la moda y la artesanía hechas en Canarias. Gracias a ella, Elena Salgado lució unos pendientes de calados canarios de Maribel Correa, en la última comparecencia con Durao Barroso. María Teresa Fernández de la Vega usa argollas canarias, y Rosa Díez y Soraya Sáenz Santamaría también tienen piezas de bisutería isleña regaladas por nuestra protagonista.

Consciente de que a las mujeres públicas se les analiza hasta la curvatura de las pestañas cuando se exponen en los medios, la diputada aprovecha la coyuntura para lucir prendas y bisutería de creadoras tinerfeñas desde la tribuna del Parlamento nacional, así como en buena parte de sus intervenciones en los distintos programas de televisión regionales y nacionales. Esposa, madre y en continuo trasiego entre Barajas y Los Rodeos, la conocida nacionalista protagoniza nuestro yo, tú, ella con el mismo empeño e ilusión que le pone a todo lo que hace y que la han llevado a estar donde está, y a continuar luchando por sus Islas. Trabajadora infatigable, a sus 52 años sabe que aún le queda mucho trabajo por hacer en defensa de Canarias. “No tenemos que pedir sino que exigir lo que nos corresponde, como al resto de los españoles”, destaca. Confiesa que la responsabilidad de un alcalde no solo se equipara sino que supera a la del mismo presidente del gobierno.

-¿Cómo se lleva ser mujer y política? ¿Se puede conciliar?

“Ahora que mi hija tiene ya 17 años y que estoy cuatro días en Tenerife y tres en Madrid, sí puedo conciliarlo, pero no pude hacerlo mientras fui alcaldesa porque eso implica total disponibilidad: 24 horas, siete días a la semana. Durante los 10 años al frente de la Alcaldía me perdí todo, fiestas de fin de curso de mi hija, que entonces tenía tres años, celebraciones de Navidad, festividades familiares, etc. Por fortuna tuve mucha ayuda de mi marido, de mi madre, de mis hermanas y de la señora que está con mi hija desde que nació”.

-¿Cree que hombres y mujeres tienen realmente las mismas oportunidades?

“Gracias a las leyes de igualdad de los últimos años hay muchos aspectos en los que sí, como en la vida política, donde en los últimos años ha habido una incorporación masiva de mujeres. Yo empecé en el mundo de la política con 18 años y con 21 fui concejala de Santa Cruz, así que he vivido la evolución. Hace 16 años era diputada en el Parlamento regional, y de 60 diputados sólo tres éramos mujeres. Ahora, hay un 40% de mujeres en el Parlamento. De igual forma, hace 10 años, sólo había dos alcaldesas en las Islas Canarias de los 87 ayuntamientos que había”.

-¿Y fuera de la política?

“Ha habido un avance tremendo en la parte política pero no así en el conjunto de la sociedad. Sobre todo en el terreno laboral, donde la igualdad continúa siendo una asignatura pendiente. Por ejemplo, en el mundo empresarial y en el de las finanzas sigue habiendo una prevalencia masculina. Considero que esta diferencia no tiene sentido, máxime cuando, desde hace muchos años, en este país hay más universitarias que universitarios, y tendiendo en cuenta también que las mujeres nos hemos adaptado mejor a la crisis económica. Somos más emprendedoras, tenemos más imaginación y capacidad de esfuerzo”.

-¿Siempre quiso ser política?

“De pequeña el súmmum para mí era regentar un kiosko de golosinas (risas). El que había en el parque de mi barrio me parecía un paraíso. Luego, quise dedicarme al mundo de la empresa. Entré en la universidad muy joven, con 17 años, y acabé la carrera de Económicas con 21. Entonces, Manuel Hermoso me propuso la Concejalía de Fiestas y luego entré en el Parlamento de Canarias. Con posterioridad, estuve en la Viceconsejería de Administraciones Públicas del Gobierno de Canarias y, después, me hice cargo de la Alcaldía de La Laguna. Esto último, es lo que más me ha marcado y me marcará para toda la vida. Por muchos puestos que tengas en la política, el que queda marcado para toda la vida es el de alcalde. Sé que dentro de 10 años me seguirán diciendo por la calle ¡adiós alcaldesa!, como me dicen actualmente en ocasiones”.

-¿Echa de menos su etapa de alcaldesa?

“Para cualquier persona, ser alcalde de su pueblo o de ciudad es lo máximo. Creo que ser alcalde es más importante que ser presidente del Gobierno. Para el presidente del Gobierno el paro son números, pero para un alcalde el paro tiene el rostro de la persona que te está esperando por fuera del despacho. Cuando estás en el Congreso, la vivienda es una política de vivienda, pero cuando eres alcalde es una familia sin casa que está fuera de tu despacho con tres chiquillos. Cuando eres alcalde le pones rostro a todo, a la vivienda, a la pobreza, a la discapacidad, al paro. Siempre llevan el rostro de alguien. Ese rostro, además, te lo llevas a tu casa por las noches. Eso implica una gran responsabilidad e implicación emocional”.

-¿Cree que José Manuel Soria actúa contra su propia tierra?

“ Entre el Gobierno de Canarias y el de España no queda más remedio que tener buenas relaciones. Yo no creo que alguien esté actuado en contra de Canarias. Las decisiones que han causado más polémica no han sido de Soria, sino que las ha tenido que defender como miembro del Gobierno central. Cierto es que algunas de esas decisiones han sido precipitadas, pero se podrán corregir en el futuro, como es el caso de las bonificaciones aéreas, o el de las energías renovables, donde ya ha habido un cambio de discurso. Creo que es necesario bajar la carga de tensión política, unirse los dos gobiernos e ir resolviendo los asuntos por el bien de Canarias”.

-¿Cómo asume la pérdida de votantes de su formación política, CC?

“Estamos trabajando de cara al congreso de junio. Hemos analizado la opinión y las críticas de personas que siempre nos habían votado y no lo hicieron. Desde los comités locales, estamos perfilando hacia qué proyecto nacionalista debemos ir. Después de 30 años el proyecto político del nacionalismo hay que renovarlo y ver qué modelo económico, cultural y de identidad queremos”.

-¿Será que la crisis deja las ideas nacionalistas en un segundo plano?

“Si existe un momento en el que te das cuenta de que los problemas de aquí tienen que resolverse con medidas especiales, porque Canarias es diferente y es, precisamente, en estos momentos de crisis cuando se nota que las políticas nacionales de empleo, económicas y fiscales no sirven para Canarias. En ese sentido, tenemos que reivindicar un mayor autogobierno para que los canarios podamos tener lo que nos corresponde por derecho. Los canarios no tenemos que pedir sino exigir no ser ni más ni menos que nadie. Los partidos centralistas tienen una visión general del país donde no encaja en las Islas Canarias. Por ejemplo, en la Península se usa el agua para producir energía mientras que en Canarias necesitamos energía para tener agua. Así es todo”.

[apunte]
Yurena Cazorla es la maquilladora profesional que ha resaltado los rasgos de Ana Oramas para este reportaje. La joven santacrucera, que desarrolla su labor profesional en diferentes productoras publicitarias y cinematográficas nacionales e internacionales, ha aplicado sombras en tonos pastel para los ojos y un coral suave en los labios. La alta bisutera Magdala Machado, propietaria y diseñadora de Magdala Bijoux, ha cedido a nuestra protagonista algunas piezas de su colección de verano. Piezas con las que Ana se sintió muy cómoda ya que tiene en su joyero diferentes artículos de esta firma tinerfeña.[/apunte]