DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz
Padres y niños se convirtieron este sábado en chefs por un día en el inmejorable marco del Aula de Cocina del Iberostar Grand Hotel Mencey. Este espacio gastronómico de Santa Cruz de Tenerife albergó el curso ‘Papás cocinando con niños’, una propuesta divertida y diferente para una cita tan especial como el Día del Padre.
La preparación de una serie de sencillas recetas bajo la supervisión del chef del hotel, Juan Carlos Clemente, hizo que los protagonistas de la actividad pasaran una mañana muy entretenida a la vez que didáctica.
Preparados para la ocasión, con gorritos personalizados, delantal y todo tipo de utensilios, los niños metieron las manos en la masa y, con la ayuda de sus padres, participaron en la elaboración de magdalenas de diferentes formas, galletas de chocolate, pizzas de diseño o hamburguesas de atún, además de unos creativos cupcakes que sirvieron de regalo para papá.
“Lo que pretendíamos era pasar una mañana muy divertida y diferente, cocinando y aprendiendo. Nos ha parecido una idea original, un rato divertido y enriquecedor para ellos”, explica Juan Carlos Clemente.
Javier, uno de los niños participantes, ya piensa en poner en práctica lo aprendido en el Aula de Cocina del Mencey. “El fin de semana pasado, en casa, hicimos y comimos nuestras cosas preferidas y ahora podemos hacer también lo que hemos hecho hoy”.
Héctor se entretiene adornando un cupcake mientras su madre, Patricia, pone en valor la celebración de una iniciativa de estas características: “Nos ha parecido una forma distinta y divertida de pasar un fin de semana con los niños, compartir actividades y también les ayuda a desarrollarse”.
Otro de los peques se afana en terminar su cupcake para regalar a papá, pero ya adelanta que en casa hará uno para regalar a su mamá. Raquel, la madre de Sofía, está encantada con la propuesta. “Nos gustó la idea de la cocina con chocolate y esta iniciativa con los niños me pareció fantástica”, afirma mientras su hija dice que esperará al lunes para entregar el regalo a su papá.
Durante cuatro horas, los pequeños participantes no perdieron detalle de las explicaciones de elaboración y siguieron con sumo cuidado la evolución de los distintos procesos de cada uno de sus platos en el Aula de Cocina del Mencey.