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Fallece el empresario Ramón Arteaga Álvarez

El empresario gomero, Ramón Arteaga Álvarez, junto a su esposa. | DA

DIARIO DE AVISOS | San Sebastián

El constructor, promotor turístico y ganadero gomero, Ramón Arteaga Álvarez falleció en la noche del pasado martes, 13 de marzo en la isla de Tenerife a los 81 años de edad tras una larga enfermedad. El féretro con los restos mortales del fallecido empresario y promotor turístico, Ramón Arteaga Álvarez, llegará a La Gomera esta tarde en el buque de Naviera Armas que parte de Los Cristianos a las 18:30 horas, según informa el portal web Gomeranoticias.

El sepelio está previsto este jueves 15 de marzo a las 13.00 horas, que partirá desde el cuarto mortuorio de San Sebastián para trasladarse hasta la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y con posterioridad al cementario de la capital insular. Casado con Doña María Reyes Castilla Cabeza era padre de tres hijos, Lorenza, Ramón Jorge y Fortunato, con los que formó una serie de empresas familiares que hoy forman parte del activo empresarial de La Gomera.

Ramón Arteaga (5 de abril de 1930) fue uno de los empresarios con mejor trayectoria profesional de la su Isla natal, lideró durante más de 50 años el Grupo de Empresas Ramón Arteaga Álvarez (RAA). A lo largo de su trayectoria, ha estado presente en las principales actividades productivas, entre las que destacan la promoción y construcción de vivienda e infraestructuras públicas, el turismo y el sector primario. Además, su dedicación se ha visto recompensada con el prestigioso premio de Arquitectura ORAA y el Premio “Arturo Escuder Croft al Mejor Empresario del Año” de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife en el año 2008.

Dentro del campo turístico, destacó por ser el fundador del Hotel Gran Rey, uno de los establecimientos hoteleros del Archipiélago más comprometidos con el medio ambiente y el desarrollo sostenible. De hecho, fue el primer establecimiento del mundo en tener el sello de Excelencia Ambiental y sostenible, reconocido por la Unesco.

Arteaga Álvarez se inició en el mundo de la construcción a principios de los años 60, cuando con apenas 30 años, creó su primera empresa de construcción de viviendas. Poco tiempo más tarde, ahorró lo suficiente para montar una planta de áridos y hormigón, instalaciones que le ayudaron a crecer y llevar a cabo sus primeras infraestructuras públicas. Es el responsable de llevar a término innumerables obras civiles, públicas y privadas en la provincia en los últimos treinta años. Cabría citar como ejemplos, la Terminal del Aeropuerto de La Gomera, el edificio del Cabildo Insular de La Gomera, el Centro de Visitantes de San Sebastián o la Terminal Portuaria de Viajeros de la capital entre otros.

Ramón Arteaga (centro), en la entrega del Premio 'Arturo Escuder Croft al Mejor Empresario del Año 2008' de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife. | DA

El esmero con el que desarrolló estos proyectos le llevó a cosechar galardones como el que concede el Colegio Oficial de Arquitectos de Canarias (ORAA), por el Centro de Visitantes de San Sebastián y la Terminal Portuaria de Viajeros de la capital, y el premio Agustín de Bethencourt a la mejor obra pública, por su trabajo en la TF-711, que une San Sebastián con el norte de la Isla hasta llegar a Valle Gran Rey, ejecutada conjuntamente con diversas empresas de las islas.

A esto hay que sumar sus incursiones en el sector primario, con la extracción de piedra natural, granito y mármol; su apuesta por el sector vitivinícola de La Gomera y su vertiente ganadera, hasta el punto de que en la actualidad era uno de los principales productores insulares de queso de cabra. Como agricultor y ganadero supo ganarse el respeto de todos, siendo de los principales productores y elaboradores de queso de la isla de La Gomera, pastando en su finca de Aluce más de 600 cabezas de ganado caprino.

Hombre con un gran espíritu emprendedor, Ramón Arteaga Álvarez, fue un hombre tenaz, que con su esfuerzo y la visión que demostró para detectar nuevas oportunidades de negocio, contribuyó a la generación de empleo y prosperidad para la Isla de La Gomera.

Además, su permanente responsabilidad social corporativa, le ha llevó a contribuir en iniciativas tan importantes como el impulso de las Fiestas Lustrales y la creación de la sede local de la Cruz Roja Española en San Sebastián.

También dentro de su labor social, Arteaga fue presidente de las Fiestas Lustrales de La Gomera entre 1983 y 1988, del Club Recreativo y Deportivo Junonia y del Club Internacional de los Leones. Su generosidad, cordialidad y desprendida entrega a los demás le hizo merecedodor de la Medalla de Oro de Méritos Humanos del Ayuntamiento de San Sebastián de La Gomera, concedida en enero de 2008.