DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
Piden la anulación del objeto del veredicto, lo que supondría en la práctica la repetición de la vista oral. Así lo comunicó ayer la defensa del matrimonio condenado por asesinar a su sobrina Yurena, fallecida en febrero de 2009 en la casa de sus tíos, en el término municipal de Güímar.
Como recordarán los lectores, tanto Juan Daniel como María de Los Ángeles fueron condenados por este crimen a 35 años de prisión para cada uno, en sentencia dictada por la magistrada de la Sección Segunda de la Audiencia provincial de Santa Cruz de Tenerife, Francisca Soriano, tras un veredicto de culpabilidad unánime emitido por un jurado popular.
Ha sido en el último día de plazo para recurrir dicha sentencia, ayer, cuando la defensa de la pareja ha presentado sus argumentos en apelación, a la espera de que sea el Tribunal Superior de Justicia de Canarias el que decida al respecto.
En concreto, el recurso entiende por una parte que el objeto de veredicto que fue entregado al jurado popular está confeccionado de f orma defectuosa, al punto que entienden que ello obstaculizó la defensa de los acusados. Uno de los abogados recurrentes, Francisco Beltrán, detalló a este periódico que a su juicio en el objeto de veredicto se confunden los hechos entre sí de tal modo que fue imposible para los miembros del jurado decidir sobre las acusaciones por separado. Recordar que a la pareja se le acusó -y se le condenó- como autores de los delitos de asesinato, maltrato continuado y detención ilegal.
Precisamente es la última acusación, la de detención ilegal, la que más dificultades ofreció para ser probada por la acusación durante la celebración de la vista oral. En este sentido no ha variado el parecer de la defensa, que sigue sin estimar que se demostrado plenamente. En el recurso se explica que la situación de Yurena en la casa de sus tíos no cumple con lo exigido en la jurisprudencia para apreciar tal delito, sin que la acusación halla ofrecido como alternativa el tipo penal de coacciones, que sí fue ampliamente demostrado en la vista oral.
El caso Yurena es uno de los más impactantes de los últimos años en la Isla, ya que la autopsia reveló que la joven falleció tras sufrir un auténtico martirio a base de golpes por los que no se le facilitó atención médica. Según se recoge en la sentencia, el móvil de este crimen pasa porque los tíos pretendían apoderarse del recién nacido de Yurena, beneficiados por su mala situación económica y su alejamiento de los padres.