N. T. | Santa Cruz de Tenerife

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife formalizó este martes el convenio con la Fundación Canarias Recicla mediante el cual la capital se convierte en la primera de las grandes ciudades de Canarias que se suma a la recogida selectiva de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE). La principal ventaja de este convenio es que el Consistorio ahorrará 32 euros por cada tonelada de residuos que se recoja, al no tener que pagarlos al complejo del Plan Industrial de Residuos Sólidos (PIRS). Además, según anunció la directora general de la Fundación, Carlota Cruz, se distribuirán a lo largo de la ciudad contenedores destinados al reciclaje de pequeños electrodomésticos, de tamaño similar a los de recogida medicamentos que existen en las farmacias.

La presentación de este acuerdo sirvió también para que el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Artega, anunciara que “en unos dos meses” se licitará y adjudicará la recogida selectiva de textiles y aceite usado.

Arteaga reconoció que en lo que va de año se ha detectado un descenso en los residuos eléctricos y voluminosos lo que denota, según el concejal, “que la gente recicla más”. Las previsiones en la recogida de residuos de estas características son de 220.000 kilos anuales, de cuya retirada se ocupará la empresa Urbaser, de forma gratuita, mientras que la gestión y la garantía de que se cumple con el tratamiento adecuado de este tipo de residuos correrá a cargo de la Fundación. Neveras, ordenadores o aspiradoras son algunos de los aparatos que reciclar.