RAYO VALLECANO B - CD TENERIFE > LA PREVIA

Un aspirante inesperado

Una jugada del encuentro entre el CD Tenerife y el Rayo Vallecano B disputado en la primera vuelta. | SERGIO MÉNDEZ

M. T. (enviado especial) | Madrid

A pesar de la crisis y de la pésima gestión de los anteriores dueños, el Rayo Vallecano vive nuevamente momentos de esplendor. Tras sufrir recientemente por el infierno que en estos momentos pasa el Tenerife, ahora el conjunto madrileño vuelve a saborear el éxito. Por un lado, el primer equipo juega en Primera División, mientras que el filial lleva casi toda la temporada metido en puestos de play off y aspira, inesperadamente, a jugar dicha liguilla tras la conclusión de la fase regular.

Buena parte del buen momento que atraviesa el Rayo se debe a un hombre que lo fue todo en el CD Tenerife: Felipe Miñambres. El exfutbolista astorgano lleva años dirigiendo la parcela deportiva vallecana y con muy poco ha obrado casi un milagro.
El Rayo Vallecano, creado en 1926, decidió fundar su filial 30 años más tarde con la intención de poder nutrir de jugadores a su primer equipo.

El paso de los años ha provocado que los rayistas apuesten cada vez más por jugadores que no han llegado a cuajar ni en Real ni en Atlético de Madrid dando oportunidades a jóvenes con ciertas posibilidades.

El Rayo Vallecano B nunca había militado en Segunda B hasta este mismo curso. Tras varias campañas (22) en Tercera, los de Vallecas lograban ser campeones de esta categoría el año pasado para preparar el asalto a Segunda B. La experiencia está siendo muy buena: son sextos en la tabla clasificatoria. Y aún puede ser mejor.