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Los universitarios deberán pagar del 15 al 25% del coste de su enseñanza

El ministro de Educación, José Ignacio Wert (5d), ha presidido la Conferencia General de Política Universitaria que se ha reunido esta tarde en la sede del Ministerio. | EFE

EUROPA PRESS | Madrid

El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte ha propuesto a las Comunidades Autónomas (CCAAA) que cada alumno pague hasta 540 euros más por la primera matrícula universitaria a partir del curso 2012-2013, según ha explicado la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, al término de la Conferencia Sectorial de Política Universitaria. Tras el anuncio de la medida, País Vasco ha adelantado que no prevé subidas superiores al IPC en las tasas universitarias, mientras que Andalucía ha pedido que cualquier política de precios universitarios incluya becas para “compensar deficiencias”.

Concretamente, el Gobierno plantea la posibilidad de ampliar la horquilla que tendrán que pagar los alumnos de su puesto universitario y que irá desde el 15 por ciento hasta el 25 por ciento del coste de este puesto en las universidades públicas. El objetivo es contribuir al recorte de 3.000 millones de euros en materia educativa anunciada por el Ejecutivo.

Además, la horquilla se ampliará entre un 30 y un 40 por ciento para la segunda matrícula, entre un 65 y 75 por ciento para la tercera matrícula y entre un 90 y un 100 por cien en la cuarta matrícula. Para los máster no habilitantes, se plantea hasta un rango máximo del 50 por ciento. Según la secretaria de Estado, se trata de aproximar el precio público de la matrícula al coste real.

Por otro lado, el Gobierno ha planteado a las comunidades autónomas cambiar la carga docente del personal universitario en función de los sexenios vivos que tengan en relación con la investigación. En este sentido, ha señalado que se reducirá la carga docente de aquellos que tengan sexenios vivos y se aumentará aquella carga docente de los profesores que no los tengan. Actualmente, según ha explicado, hay un 50 por ciento de funcionarios profesores universitarios que no tienen sexenios vivos.

En todo caso, la secretaria de Estado ha explicado que cada una de las medidas serán decididas por las comunidades autónomas, que tomarán las decisiones y el tipo de acciones que quieren implementar dentro del abanico de posibilidades. “Decidirán, no sólo las medidas que necesita implementar la comunidad, según las necesidades de las universidades, sino también el grado de intensidad”, ha informado.

La subida de las tasas universitarias ya ha sido criticada por el PSOE, que ha advertido a través de su portavoz de Educación en el Congreso, Mario Bedera, que dicho aumento es “insoportable”, por lo que luchará “con todas sus fuerzas para evitarlo.

“Nos vamos a oponer clarísimamente a esta medida y vamos a luchar con todas nuestras fuerzas para que no se produzca”, ha dicho en declaraciones a Europa Press, para añadir que el aumento de tasas junto a la bajada de becas es un “cóctel explosivo”.

Antes de que fuera anunciado dicha subida de las tasas, la portavoz de Educación de la Izquierda Plural en el Congreso, Caridad García Álvarez, ya señalaba que ese posible aumento será inalcanzable para muchas familias españolas. “Va a ser difícil y complicado, por no decir imposible”, ha recalcado.

PAÍS VASCO NO PREVÉ SUBIDAS SUPERIORES AL IPC EN LAS TASAS

Tras el anuncio del Ejecutivo, el País Vasco ya ha adelantado que prevé aumentar como máximo el porcentaje del IPC en las tasas universitarias pese a la propuesta que ha realizado el Gobierno para que las autonomías puedan elevar su coste hasta un 50%.

Así lo ha avanzado el viceconsejero de Universidades y Educación de la comunidad, Pedro Luis Arias, después de la Conferencia General de Política Universitaria celebrada este jueves en Madrid, donde ha explicado que actualmente los alumnos pagan alrededor de un 15% del coste real de su educación.

“Si el coste real puede estar fijado en unos 6.000 euros y ahora los alumnos pagan de media 1.000 euros, la subida sería hasta los 1.500 euros”, ha puesto como ejemplo Arias, antes de aclarar que el País Vasco seguirá con su política de aplicar las subidas mínimas a las tasas y podría incrementarlas “como mucho el IPC”.

De este modo, el viceconsejero vasco ha insistido en que cada comunidad autónoma podrá tomar las decisiones “que considere oportunas” y, además, que la medida no afectará a los alumnos que ya están cursando estudios universitarios y solo se aplicará a los de nueva matrícula.

Ante esta subida de las tasas universitarias, la Junta de Andalucía ha reclamado a Educación que cualquier cambio en la política de precios de las universidades lleve acompañada una política de becas que “compense las deficiencias o dificultades de acceso” de los alumnos por razones económicas. La petición, en principio, ha sido aceptada por el Gobierno.

ANDALUCÍA PIDE APOSTAR POR LA COMPETITIVIDAD

Todo ello lo ha explicado el secretario general de Universidad, Investigación y Tecnología de la Junta, Francisco Triguero, que ha hecho hincapié en que para salir de la crisis económica no sólo se tienen que modificar las “condiciones laborales” y las “remuneraciones salariales”, sino también apostar por “el conocimiento, la innovación y la investigación para ser realmente más competitivos”.

La Comunidad de Madrid, por su parte, ha planteado al ministro de Educación que no haga diferenciación entre los nuevos alumnos que entren el próximo curso en la universidad y los que ya están matriculados en ella a la hora de aplicar el nuevo sistema de tasas.

La consejera de Educación de Madrid, Lucía Figar, ha explicado que tanto ella como los representantes de Cataluña y Baleares han hecho esta sugerencia al ministro, que se ha comprometido a estudiarla.

“Hay que evitar que se entiendan mal situaciones como que un alumno de segundo o tercero con un alto nivel de renta pague menos que un alumno de primero con un nivel económico y social muy por debajo. Esas situaciones se entenderían mal y hemos pedido al ministerio que abra la horquilla a todos los cursos. Es importante que no haya discriminaciones en cuestión de renta”, ha indicado en declaraciones a los medios.

La subida de las tasas universitarias en la Comunidad de Madrid, según ha subrayado Figar, tratará de “hacer de la necesidad virtud” y que los ajustes “sirvan no sólo para un propósito recaudatorio, sino también para mejorar la calidad de la enseñanza universitaria”.

LOS ESTUDIANTES AMENAZAN CON RECURRIR A LOS TRIBUNALES

A quien no ha sentado nada bien el incremento de las tasas ha sido a los universitarios que, mediante el secretario general del Sindicato de Estudiantes, Tohil Delgado, han acusado al Gobierno de intentar “expulsar a miles de jóvenes de familias humildes de la universidad”.

La medida anunciada por el Ejecutivo supone un “grave ataque” a la escuela pública que, según apostilla Delgado, “puede ser solo el anticipo”. Por ello ha mostrado su “temor” a que se reduzca “drásticamente” el número de alumnos a causa de las “matriculas imposibles impuestas desde el Gobierno del PP.

En la misma línea se ha pronunciado el portavoz de FACUA-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, que ha calificado de “inaceptables” las nuevas tasas universitarias que plantea el Ministerio de Educación, al tiempo que ha criticado al Ejecutivo por “cebarse” con la enseñanza pública.

Asimismo, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) ha afirmado que no descarta “diferentes medidas de presión”, junto al resto de organizaciones representativas de la Sanidad y de la Educación, “para defender el sistema de bienestar, ante las reformas y los recortes planteados por el Gobierno y las diferentes comunidades autónomas”, según ha informado en un comunicado.