LUIS F. FEBLES | Puerto de la Cruz
Vuelta a la calma. La Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias ha declarado apto para el consumo el agua en todos los municipios del Norte de Tenerife, tras el vertido de gasoil en el Canal Aguamansa-Santa Cruz, según informó el Ejecutivo regional.
Así, los municipios a priori más afectados por la contaminación de hidrocarburos, Santa Úrsula, La Victoria y La Matanza, recuperan la normalidad tras los óptimos resultados evidenciados en los análisis del agua, que indicaban la inexistencia de tóxicos, pudiendo ya consumir agua del grifo. Sólo La Victoria tendrá que proceder a la limpieza y saneamiento del depósito de Las Lajas, dentro de las medidas cautelares adoptadas por el Gobierno de Canarias. Ante la alerta creada, desde las diferentes administraciones municipales se envía el mismo mensaje: todos los vecinos pueden beber sin ningún problema el agua de sus casas.
Tras el levantamiento de las medidas preventivas, la alcaldesa de Santa Úrsula, Milagros Pérez (PP); el alcalde de La Victoria, Haroldo Martín (CC); y el alcalde de La Matanza, Ignacio Rodríguez (PSOE), coinciden en señalar la rapidez con la que las administraciones municipales actuaron desde el momento en el que se detectó la alarma, procediendo al cierre de los depósitos supuestamente afectados.
Además, contemplan la posibilidad de adoptar medidas legales para dirimir responsabilidades. Milagros Pérez indica que los análisis y contraanálisis realizados en la noche de anteayer “corroboraron la inexistencia de gasoil en el agua que llega al municipio”. La alcaldesa seguirá con la campaña de información a los vecinos a través de la megafonía móvil, anuncios en la página web y bandos municipales. “Por fin, vecinos, colegios y guarderías pueden volver a la normalidad”, subraya. Por su parte, Martín, quiere aclarar que aunque en el depósito de Las Lajas haya que efectuar labores de limpieza, “la ciudadanía debe estar serena puesto que es una cuestión protocolaria; esa parte del depósito no llega al suministro vecinal”.
Errores de base
El mandatario nacionalista comenta que “problemas como los sucedidos en el Norte de la Isla evidencian que hay deficiencias que las administraciones deben subsanar cuanto antes”. El veterano dirigente socialista, Ignacio Rodríguez, y el concejal de Servicios del Ayuntamiento de La Matanza, Miguel Ángel Pérez, se lamentan de la demora en la llegada de los resultados de las pruebas. “No entendemos la razón por la cual no existe un laboratorio especializado en la Isla; no se puede tardar tanto en esperar una respuesta”, apostilla el alcalde matancero.
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Daños colaterales
Los efectos de las necesarias restricciones provocaron en los municipios danmificados daños colaterales. Los alcaldes de Santa Úrsula, La Victoria y La Matanza señalan la negativa repercusión económica de las restricciones en los restaurantes y negocios locales. El edil matancero, Miguel Ángel Pérez estima que la demora en el resultado de las analíticas produjo que hoteles y agricultores pasaran varios días sin poder usar el agua pública, con la repercusión económica que ello conlleva. “Si llega a durar varios días más, las pérdidas hubieran sido mayores”, dice. Aunque no se han cuantificado estas pérdidas, “exigiremos responsabilidades a la empresa en cuestión”. La Matanza ha sido uno de los municipios más afectados por la tardanza en las pruebas.
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