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El Barça quiere la Liga y la tiene ahora a un punto

El delantero del F. C. Barcelona, Pedro (i), pelea un balón con el defensor argentino del Getafe, el "Cata" Díaz, durante el encuentro. / EFE

ÀLEX SANTOS (EFE) | Barcelona

El FC Barcelona dormirá esta noche a un punto del líder, el Real Madrid, después de deshacerse con una superioridad incontestable del Getafe (4-0), y a la espera de cómo se desarrolle el derbi madrileño en el Vicente Calderón.

Dos tantos de un vigoroso Alexis Sánchez, uno de Messi marca de la casa y otro de Pedro llevaron al Barça hasta las puertas del liderato, quedando a la espera por si otro tropiezo del líder desbarata la máxima de Josep Guardiola, quien insistentemente ha asegurado que su equipo no tiene ninguna opción de llevarse el torneo.

El Barcelona se topó ante un rival que desde el arranque del partido entregó no sólo la pelota sino el terreno de juego, ya que el Getafe dispuso un dibujo con jugadores alrededor de su área y cerrando cuantos espacios pudiese ver el conjunto catalán.

Fue sorprendente ver a nueve futbolistas del Getafe entregados a una defensa casi impenetrable, mientras el venezolano Miku ocupaba la zona adelantada en solitario.

El partido no podía tener otro desarrollo que ver al Barcelona con el balón y moviéndolo por todos los metros cuadrados en busca de un espacio para abrir la muralla rival. El alto caudal de ocasiones volvió a estar al nivel de otros partido, pero también la baja efectividad azulgrana ante la meta rival, a pesar de haber marcado dos tantos en la primera parte.

El embotellamiento que originó el Getafe llevó a ver un partido en el que el gol del Barça sólo era cuestión de tiempo que llegase. La primera la tuvo Puyol, que de remate de cabeza obligó a una intervención feliz de Moyá, a quien le llegó el balón desviado por un compañero.

Empotrados los jugadores del Getafe cada vez más cerca de su área, persiguiendo la pelota y haciendo movimientos bastante sincrónicos, al Barça le costaba descubrir un agujero por donde meter el balón, ya que por alto casi ni lo intentó (a excepción de la segunda parte con dos tantos de cabeza), por un claro desequilibrio de centímetros desfavorable a los azulgrana.

A poco de llegarse al cuarto de hora, el Barça abrió la lata en una acción veloz, en la que Iniesta sirvió a Messi, éste a Alexis con el pecho y el chileno, después de prepararse el balón con un toque, conectó un duro disparo que se coló entre los tres palos (1-0).

Nada cambió en el Getafe con el gol desfavorable, al contrario, continuó a verlas venir y el Barcelona se encontró liberado y más relajado. Así fue cómo se sucedieron unos minutos de máxima producción ofensiva en la que el Getafe se salvó de encajar más goles. Moyá sacó una mano en el 16 después de un disparo de Pedro, mientras que un minuto después Messi envió a Xavi y éste levantó suavemente el esférico pero cuando parecía que entraba, Cata Díaz lo rebanó de la línea de gol.

Pocos minutos después, un gran pase de Busquets a Messi habilitó al argentino para que se estrenase sólo ante Moya, pero falló un gol cantado.

En el 28, un córner a favor del Getafe propició la primera y única ocasión de gol del equipo madrileño en todo el partido, en un disparo de Rubén Pérez, que un barcelonista desvió a córner, cuando el balón se había envenenado.

Antes de que Messi marcara su tanto (2-0), tras una extraordinaria pared con Iniesta, Alexis también la tuvo cuando pudo haber marcado, pero optó por poner el pie derecho en lugar del izquierdo en un pase de la muerte, que acabó con el balón estrellado en el lateral de la meta.

En la segunda parte, con un viento molesto, además de la lluvia, el terreno de juego estuvo mucho más veloz y a ello el Barça respondió con un ritmo más lento, ya que parte del trabajo ya estaba hecho.

Con esta nueva dinámica, tampoco le costó al Barça encontrar sus espacios porque continuó dominando, pero el Getafe se sintió más seguro para adelantar unos metros a todas sus líneas y salir poco a poco de la cueva en la que quedó atrapado en la primera parte.

En una de las numerosas incursiones de Cuenca por la banda derecha, centró un balón al bulto que repelió la cabeza de Alexis para marcar su segundo tanto, el 3-0.

El Barcelona no desperdició la ocasión un minuto después para, en una falta casi en el córner, lanzar un balón el área donde Pedro también puso la cabeza para marcar el cuarto (4-0).

El partido se liquidó con una acción de Messi que hizo enloquecer a un Camp Nou entregado al argentino, después de que el internacional se llevase a cuantos rivales le aparecieron por medio, hasta que el balón lo rechazó Moyá y después el travesaño.