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¡Los playoffs corren peligro!

Pablo Sicilia contempla la celebración del tanto que dio la victoria al Atlético de Madrid B. / ACFI PRESS

MARTÍN TRAVIESO | Madrid (enviado especial)

Al Atlético de Madrid B le bastó hacer lo justo, dominar la primera parte y marcar un gol en la segunda, para superar a un CD Tenerife que afronta los tres últimos partidos de la fase regular en estado absolutamente precario. La autoestima, la fe, la confianza y la aptitud son conceptos que desaparecieron hace mucho del vestuario. La calidad muy pocas veces ha aparecido. Con estos ingredientes da igual el entrenador que se siente en el banquillo: el proyecto parece abocado al fracaso. Y por si fuera poco, el Oviedo agravó el tropiezo de ayer con su victoria ante el Real Madrid Castilla. Los ovetenses ya están a solo un punto de distancia y son los siguientes en visitar el Heliodoro Rodríguez López.

Quique Medina intentó dar otro giro a la tuerca. Saltó al campo del Cerro del Espino sin un ‘9’ puro. Perona y Kiko se quedaron en el banquillo. Luismi y Kike López actuaron juntos en el ataque. Resultado: cero disparos entre los tres palos en toda la primera parte. Se entiende que el técnico tinerfeño intente dar un volantazo para corregir el rumbo de equipo, pero a estas alturas del campeonato, como se suele decir, los experimentos con gaseosa por favor.

Luismi necesita una referencia arriba y ese, desde luego, no es Kike López. Tampoco ayudaron el resto de compañeros. Medina pobló el centro del campo de jugadores con el fin de convertir a los suyos en protagonistas del duelo. Sucedió todo lo contrario. Fueron los colchoneros los que manejaron la situación a su antojo. Es cierto que nunca fueron especialmente peligrosos, pero el dominio de la pelota, incontestablemente, fue local.

Así se produjeron varios tímidos acercamientos al área de Aragoneses, hasta que en el 31 Gerard lo intentó con intención de hacer daño. Resolvió Aragoneses. El disparo más peligroso de los visitantes había llegado minutos antes, en el 16, con un zurdazo de Luismi Loro que no encontró portería.

A medida que fueron pasando los minutos, el partido fue cayendo en un sopor insoportable. El Tenerife era incapaz de crear peligro. Ni siquiera el cambio de bandas de Chechu y Ferrán mejoró algo (minuto 35). Además, parecían satisfechos con el punto. El Atlético igual, a pesar que el de ayer era el último tren que les permitía soñar con jugar los play off. Era cogerlo o perderlo y pensar ya en la próxima campaña.
El final del primer acto llegó entre los ronquidos del personal. El balance para el Tenerife era lamentable: cero disparos entre los tres palos y la imagen penosa para un equipo que, en teoría, es candidato a regresar a Segunda.

No era muy complicado mejorar lo de la primera parte, por lo que en la segunda se vio a un Tenerife que buscó, algo más, la meta de Iago.

Al minuto de la reanudación, Chechu Flores, que reaparecía en el equipo tras varias semanas de ausencia por lesión, aprovechó para disparar un balón que se había quedado sin dueño en la frontal del área rojiblanca. El lanzamiento no resultó con demasiada potencia, pero aún así el meta se lució con una bonita parada para despejar el balón. Corría el minuto 46 y fue el primer lanzamiento entre los tres palos que efectuó el Tenerife.

La réplica llegó de las botas de Fernando López, en el minuto 58. Falta que ejecuta el organizador y parada de Sergio. Poco después, otra vez el meta gallego salva a su equipo (minuto 65), pero no pudo remediar lo irremediable. Centro por la derecha, remate de cabeza abajo de Noguera, Sergio desvía pero el rechace cae en los pies de Gerard, que se limitó a empujar al fondo de la portería el balón. Era el1-0, que a la postre resultaría totalmente definitivo.

Fue entonces cuando entraron las prisas en el equipo tinerfeño. Jorge Perona había accedido al campo, sustituyendo a Chechu, pero se le sumó en el ataque Kiko Ratón, que sentó a Luismi Loro. Con los dos delanteros centros en el campo, tampoco es que la cuenta de ocasiones se disparase. De hecho, paradójicamente, Iago no tuvo que intervenir más para evitar ningún tanto desde que su equipo se puso por delante en el marcador. Había margen. Quedaba tiempo para empatar, incluso para remontar, pero lo que no había era capacidad.

El Tenerife es, a falta de tres partidos, un equipo basado en la indiferencia. Tanto de sus dirigentes como de sus jugadores, que no parecen mentalizados de que en menos de una semana juegan una final contra un Oviedo que viajará a la Isla extramotivado tras derrotar al Real Madrid Castilla. Malos augurios para un equipo que a estas alturas da lástima.

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ATLÉTICO DE MADRID B (1-0) CD TENERIFE

Encuentro correspondiente a la jornada 35 del Grupo I de la Segunda B

Atlético de Madrid B: Iago Herrerín; Manquillo, Elbis (Javi Cantero, min. 58), César Ortiz, Regalón; Fer López, Omar, Cidoncha, Sergio Marcos (Vicente, min. 76); Gerard (Ndoye, min. 79) y Noguera.

CD Tenerife: Sergio Aragoneses; Cristóbal, Pablo Sicilia, Tarantino, Raúl Llorente; Marcos Rodríguez , Víctor Bravo, Chechu Flores (Perona, min. 59), Ferrán; Luismi Loro (Kiko Ratón, min. 73) y Kike López.

Árbitro: Israel Simón del Pino, del colegio catalán. Amonestó por los locales a Gerard y por los visitantes a Tarantino y Marcos Rodríguez. Ambos se perderán el partido del próximo domingo ante el Real Oviedo.

Goles: 1-O: min: 60, Gerard.

Incidencias: Encuentro disputado en el estadio Cerro del Espino ante unos 500 espectadores, de los cuales medio centenar eran aficionados visitantes. El Tenerife lució su segunda equipación, camisa azul y pantalón blanco y el presidente del club, Miguel Concepción, siguió el choque en directo.

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