TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife
“Siempre habrá que esperar a lo que decida la Justicia, pero el de Adeje es el caso más grave que se recuerda en el Colegio de Médicos de Santa Cruz de Tenerife, al menos desde que yo soy presidente”. Es la valoración que hace Rodrigo Martín, máximo representante de los galenos provinciales desde que arrancó el siglo, sobre el caso del supuesto médico detenido la semana pasada en Adeje y que ha sido imputado por hasta cuatro tipos delictivos.
Martín desveló este lunes a este periódico que el inculpado, un italiano de 39 años de edad que aseguraba ser doctor en Medicina y Cirugía, intentó colegiarse hace un par de semanas. Fue entonces cuando la organización que preside detectó que su documentación no estaba en regla y puso en conocimiento de la Fiscalía las anomalías detectadas.
Esta denuncia del Colegio de Médicos se habría unido a las presentadas por varios pacientes, sustentado así la minuciosa investigación llevada a cabo por la Unidad de Droga y Crimen Organizado del CNP.
Dicho trabajo policial se llevó a cabo durante un mes antes de que tuviera lugar el arresto y los registros, tanto de la clínica donde trabajaba el imputado como de su domicilio particular, ambos sitos en Callao Salvaje.
En sus declaraciones a este periódico, Rodrigo Martín detalló que fue la Subdirección General de Títulos del Ministerio de Educación la que informó al Colegio de Médicos provincial que a nombre del presunto falso médico, identificado por las iniciales D.S., no figuraba homologación alguna registrada, dato que fue comunicado a la Fiscalía.
De cualquier modo, los investigadores del Cuerpo Nacional de Policía ya tenían más que sospechas sobre la autenticidad de la homologación que presentaba el ahora imputado, ya que en ésta advirtieron varias faltas de ortografía, tal y como planteó el Ministerio Público en el juzgado de Instrucción número 4 de Arona, cuyo titular es el magistrado Nelson Díaz Frías.
A nombre de otro
Un dato más refuerza las acusaciones del fiscal respecto a la falta de titulación del imputado, ya que según sostiene utiliza el número de colegiado de un médico de su misma nacionalidad, aunque ya de cierta edad y, al parecer, radicado en la localidad transalpina de Parma.
De momento, son tres las demandas privadas que ya se han formulado contra el supuesto médico, además de los cuatro delitos que le achaca la Fiscalía: intrusismo [que, en todo caso, sería una tentativa, según detalla Martín], falsedad en documento público, estafa y contra la salud público.
Como anticipó ayer DIARIO DE AVISOS, el título que lo habilitaba está a nombre de una universidad estadounidense que sólo enseña Teología.