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El Lugo, eterno aspirante

J. A. F. | Santa Cruz de Tenerife

Lo ha intentado muchas veces, pero solo lo ha logrado en una ocasión. El Club Deportivo Lugo, muy a su pesar, se ha convertido en todo un clásico de la Segunda División B. El cuadro rojiblanco, en una ciudad en la que predomina el baloncesto, siempre ha destilado modestia hasta que hace varios cursos logró definitivamente instalarse como uno de los clubes importantes de la competición.

El año pasado fue dramático. Tras ser el gran favorito, los lucenses cedieron en la eliminatoria que les medía al Guadalajara. Los gallegos se quedaron un año más con la miel en los labios, pero supieron mantener un bloque para seguir siendo aspirante.

A pesar de las bajas de Cristóbal Juncal y Marcos Rodríguez rumbo a otro aspirante como es el CD Tenerife, Quique Setién se mantuvo al frente de una nave que dio continuidad a una columna vertebral en la que destaca Carlos Pita en el centro del campo. Anular a Pita es anular al CD Lugo, lo malo es que muy pocas ocasiones se consigue eso. Ya lo manifestaron en la primera vuelta Marcos y Cristóbal justo antes de que su equipo lograra sacar un empate del Anxo Carro después de haber estado a merced de su rival en la mayor parte del encuentro.

La última derrota por 1-5 frente al Real Madrid Castilla provoca que los gallegos lleguen a la Isla con aún más urgencias de las deseadas.

Aún así, los de Setién son el equipo con menos derrotas de todo este grupo de la Segunda B y solo han caído en dos ocasiones a domicilio, frente al Castilla y La Roda. Además, es el rey del empate, pues ha visto como sus partidos han acabado en igualada hasta en 13 ocasiones.

Hoy Quique Setién, sancionado, no podrá sentarse en el banquillo visitante del Heliodoro, como, por el mismo motivo, también se perderán el encuentro Víctor Marco e Isma López, dos jugadores importantes dentro del once rojiblanco.