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El precio de las verduras se triplica en puestos de venta

Imagen de archivo de un agricultor sembrando en un huerto, en la isla de Tenerife. / DA

MARÍA FRESNO | Santa Cruz de Tenerife

Un plato de potaje hecho con productos comprados directamente al agricultor, es decir, sin intermediarios, y otro con verduras y hortalizas adquiridas en los supermercados triplica, en este último, su precio, según datos de marzo. La factura de las verduras compradas en origen se elevó a 4,68 euros. Los mismos productos agrícolas adquiridos en los hipermercados costaron 11,36 euros.

Según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que publica mensualmente la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la diferencia media entre el precio de origen y de destino osciló, en Canarias, en 2,33 puntos; 2,70 en los productos agrícolas, y 1,97 en los ganaderos.

Esta disparidad llega, incluso, a multiplicarse por cuatro en algunos productos, como, por ejemplo, el puerro, la col o la zanahoria. En este último caso, el precio en origen, por un kilo se pagó, en marzo, a 0,48 céntimos de euros, vendiéndose en destino a 2,01 euros. El margen de beneficio para la distribuidora fue del 322%.

Otro caso especialmente llamativo es el del calabacín, cuyo precio de destino se incrementó tres veces con respecto al de origen. Los agricultores recibieron 0,32 céntimos de euro por un kilo de calabacines, pagándose a 1,15 en destino.

El resto de hortalizas, como acelgas, judías verdes o berenjenas, también multiplicó por dos su precio. Los tomates de ensalada, la lechuga o el pepino dieron un margen de beneficios a las cadenas de distribución que oscila entre el 90% y el 233%.

En cuanto a la ganadería, la ternera pasó de 3,65 euros por kilo en origen a 10,19 euros en destino. La carne de cerdo se multiplicó por tres y pasó de 2,18 euros por kilogramo a 7,55 euros, situándose el margen de beneficio del distribuidor en un 247%. Otro aumento a resaltar es el de la leche, que pasa de 0,45 céntimos el litro en origen, a 1,12 euros en destino. El representante de COAG en Tenerife, Miguel López, explicó que estas diferencias de precios aumentan mes a mes y recomendó que se intente comprar directamente a los agricultores, “porque, cuanto más intermediarios, más se encarece el producto”.

López insistió en la necesidad de que salga adelante la ley estatal de calidad alimentaria, que está “estancada”, para que regule, cuanto antes, el sistema de precios, “de la misma manera que se han fijado tarifas para el agua o las telecomunicaciones”, matizó. López reclamó la creación de un observatorio de precios real, porque los agricultores “no podemos” tener precios por debajo de los costes de producción. Hay algunos productos que “ya los estamos vendiendo así”, dijo. “Para nosotros”, continuó, tiene que ser “rentable vender nuestra verdura. El precio de venta nos tiene que dar, al menos, para cubrir gastos”.