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El sector del transporte protesta sin cubrir los servicios mínimos

M. FRESNO | Santa Cruz de Tenerife

El sector regional del transporte protagonizará mañana, jueves, un cierre patronal en protesta por la continua subida del precio del carburante en las Islas y para pedir la publicación de la normativa que elimina la exigencia del uso del tacógrafo en Canarias.

Los empresarios realizarán este paro sin cubrir los servicios mínimos acordados en la mesa de trabajo del grupo de transportes de CEOE-Tenerife y del consejo de usuarios del transporte marítimo de Canarias, después de que la Delegación del Gobierno no los autorizara, aunque sí ha garantizado presencia policial contra posibles piquetes.

El presidente del consejo de usuarios, Eduardo Bezares, explicó que, al tratarse de una huelga patronal, “no tenemos derecho”a los servicios mínimos, “por lo que dependerá de la autonomía” de cada empresa.

La Confederación Provincial de Empresarios de Santa Cruz de Tenerife había solicitado que se mantuvieran los servicios de transporte de la mercancía perecedera, congelada, peligrosa y el transporte interinsular de productos agrícolas y ganaderos, así como el transporte escolar y turístico hacia los aeropuertos. Bezares afirmó que no puede hacer una valoración sobre lo que este paro supondrá económicamente para la Isla, pero sí afirmó que espera que se deje trabajar a aquellos empresarios que así lo deseen.

Por lo pronto, el director de la asociación de transportistas terrestres de contenedores y cargas especiales de la provincia (Transteco), Pedro González, aseguró que no secundarán este paro porque, “en la época actual de crisis, solo contribuirá a paralizar aún más la actividad económica”. Bezares destacó que con la negativa de Transteco a secundar la protesta, la actividad del puerto “está garantizada”. Asimismo, Bezares indicó que también espera que queden cubiertos los servicios de transporte escolar y de turistas.

El colectivo de transportistas se reunió en la tarde de ayer con el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, en un último intento por reconducir la situación.