JOSÉ ANTONIO FELIPE | SANTA CRUZ DE TENERIFE
Hasta que se oficialice su ascenso a Liga ACB, el CB Canarias tendrá que seguir escuchando los rumores que llegan desde varios equipos de ACB que, al estar prácticamente descendidos en lo deportivo, se agarran como un clavo ardiendo a la posibilidad de seguir en la máxima división del baloncesto europeo gracias a una posible renuncia canarista. Tras el Estudiantes parece tocarle el turno al Valladolid.
Los pucelanos son, con solo 7 victorias en su haber, los últimos clasificados de la ACB. Además, los múltiples problemas económicos que arrastran llevarían a la desaparición del club si el descenso acabara por consumarse, por lo que la imposibilidad de ascender del Iberostar Socas Canarias parece, a día de hoy, su única opción.
Fuentes del club morado señalaban ayer a este periódico que estiman en unos nueve millones de euros la cantidad que necesitaría el equipo tinerfeño para poder ascender y esperan repetir lo ocurrido hace varias campañas, cuando evitaron el descenso administrativo gracias a que el Bilbao, que se había ganado su derecho a ascender, no reunió el dinero necesario.
Pero desde la ciudad castellana se tantean otras opciones como que el otro equipo que pueda ascender, como podría ser Menorca, Burgos, La Palma o cualquier otro conjunto de los que puedan disputar play off de ascenso tampoco pudieran hacer frente a los pagos exigidos. A pesar de ello, desde Valladolid y Madrid también se está muy atento a lo que suceda en Alicante, toda vez que ayer era el día señalado para que el administrador judicial que lleva las riendas del club se pronunciase acerca del futuro del mismo.
Eso no sucedió, por lo que se espera que hoy llegue una confirmación oficial que anuncie la desaparición de una entidad que se ha visto envuelta en muchos problemas de tesorería en las últimas campañas.
Desde el CB Canarias no solo no se entra a valorar dichos pronunciamientos, sino que se es optimista de cara a poder cumplir con todos los requisitos necesarios en el plazo y forma estipulada.
Cuando a nivel nacional surgió la noticia de que el Estudiantes esperaba aprovechar una hipotética renuncia canarista, Félix Hernández, presidente tinerfeño, se limitó a decir que no le había gustado “que no se nos pidiera nuestra opinión”, pero quiso quitar hierro al asunto. “No nos gusta, está claro, pero nosotros nos dedicamos a lo nuestro que es seguir trabajando. Suena a campaña desde la Península, pero eso no nos preocupa”, advirtió de manera tajante.