La Laguna da el adiós al obispo Felipe Fernández

Bernardo Álvarez acompaña el cuerpo del obispo emérito de la Diócesis Nivariense Felipe Fernández. / FRAN PALLERO

DIARIO DE AVISOS | La Laguna

El Obispo Emérito de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna, Felipe Fernández García, ha fallecido este Viernes Santo a las 14.45 horas en el Hospital Universitario de Canarias (HUC) a los 76 años de edad debido al agravamiento de una insuficiencia respiratoria que venía arrastrando hace varios días.

Fernández ingresó en el Hospital Universitario de Canarias a última hora de la tarde del Jueves Santo, desde la Casa de Acogida Madre del Redentor de El Sauzal donde residía en los últimos tiempos, tras haberse agravado considerablemente su estado de salud.

El Obispo nivariense Bernardo Álvarez pidió una oración por quien ejerció su ministerio episcopal en estas Canarias occidentales entre 1991 y 2005. El 29 de junio de 2005 fue nombrado Administrador Apostólico de la Diócesis al ser aceptada su renuncia por razones de salud que había presentado en septiembre de 2004, cesando el 4 de septiembre de 2005 al tomar posesión el nuevo obispo, pasando a ser obispo Emérito de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna.

Capilla ardiente y funerales de don Felipe Fernández

La capilla ardiente de don Felipe Fernández García se abrió el sábado a las 10.30 horas de la mañana en la capilla del Obispado. Allí permanecerá hasta las 16.00 horas de este domingo, momento en el que será trasladado a la Sede provisional de la Catedral de La Laguna, el templo de Nuestra Señora de La Concepción.

En esta iglesia será velado hasta la Misa Exequial que se celebrará en ese mismo lugar el próximo martes día 10 de abril a las 13.30 horas. Don Felipe recibirá cristiana sepultura en la Sede Catedralicia.

La Diócesis nivariense ha pedido a todos los fieles que le tengan en cuenta en sus plegarias y participen con fe en los actos de la Pascua, Pascua Eterna en la que ya participa nuestro Obispo Emérito Don Felipe Fernández García.

Biografía

Felipe Fernández García nació en San Pedro de Trones, León, el 30 de agosto de 1935. Fue ordenado Sacerdote en Plasencia el 28 de julio de 1957. Recibió la consagración episcopal el 28 de noviembre de 1976 en la Catedral de Ávila, tomando posesión de la Diócesis para la que había sido designado por su santidad Pablo VI.

Realizó sus estudios en Sagrada Teología en la universidad Pontificia de Salamanca en 1958. Es licenciado en Ciencias Sociales por la Universidad Gregoriana de Roma en 1960.

Fue coadjutor de la parroquia de Santiago en Don Benito, Badajoz, de 1960-1965. Consiliario de varios movimientos de Acción Católica en el mismo lugar de 1960 a 1965 y profesor de Religión del Colegio Público de Plasencia entre 1960-1965. Por otro lado, fue secretario de redacción de la revista Pastoral Misionera (1965-1969). Ejerció de profesor de Sociología, de Doctrina Social de la Iglesia y de Pastoral en el Seminario Mayor de Plasencia entre 1968-1976.

De 1969 a 1976 fue Vicario de Pastoral de Plasencia y profesor de la Universidad Pontificia de Salamanca (1972-1976).

Ha sido Obispo para la Acción Católica Española y Presidente de Manos Unidas-Campaña contra el Hambre de 1977 a 1984. Participó como Miembro Sinodal en el Sínodo de los Obispos sobre los Laicos en 1987.

También ha sido miembro de las Comisiones Episcopales de Apostolado Seglar (1976-1984), Patrimonio Cultural (1990-1993) y clero (1993-2005). Además, fue Presidente de la CEAS (1984-1990).

Nombramiento y llegada a Canarias

El 12 de junio de 1991, el Papa Juan Pablo II le nombra Obispo de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna. El 24 de julio de 1991 toma posesión por poder, haciendo su entrada en la Diócesis el 11 de agosto de 1991.

Entre sus importantes e innumerables actividades pastorales a lo largo de los años de pontificado, se destaca principalmente la convocatoria y realización del Primer Sínodo de la Diócesis Nivariense. Sin duda, por este motivo principalmente, su nombre quedará unido para siempre a la historia de la Diócesis.

Los obispos Felipe Fernández y Bernardo Álvarez. | DA

El 29 de junio de 2005 es nombrado Administrador Apostólico de la Diócesis al ser aceptada su renuncia por razones de salud que había presentado en septiembre de 2004, cesando el 4 de septiembre de 2005 al tomar posesión el nuevo Obispo, Bernardo Álvarez, pasando a ser Obispo Emérito de la Diócesis nivariense.

En su pontificado ordenó 68 presbíteros diocesanos, 5 religiosos y 2 diáconos permanentes.

En el servicio episcopal de Felipe Fernández durante sus catorce años en la Diócesis Nivariense, destacan:

*Celebración del Primer Sínodo Diocesano, después de tres años de preparación (1995-1998). La Asamblea Sinodal, celebrada del 31 de mayo al 8 de diciembre de 1998 y promulgación de las Constituciones Sinodales (2 de febrero de 1999).

*Durante su episcopado Juan Pablo II canonizó al primer santo canario, el Hermano Pedro, el 30 de julio de 2002 en Guatemala

*Creación del Consejo Diocesano de Pastoral.

*Instauración del Diaconado Permanente.

*Creación en la diócesis del Instituto de Ciencias Religiosas a distancia San Agustín.

*Nuevo impulso a la preocupación de su predecesor por el diálogo fe-cultura; mantuvo igualmente un diálogo fluido con artistas e intelectuales en su preocupación por impulsar distintas manifestaciones de arte religioso contemporáneo.

*Se puso en marcha la Residencia Santo Tomás de Aquino, para universitarios.

*Institucionalización cada siete años de la Visita de la Virgen de Candelaria a Santa Cruz y La Laguna alternativamente

*Inauguración del Monasterio de Monjas Cistercienses, en Breña Alta (La Palma) y otro para monjes en Güímar.

*No menos importante fue su atención al cuidado y restauración del patrimonio. Durante su pastoreo se restauró y abrió la nueva sede del archivo histórico diocesano, se iniciaron las obras de restauración de la Catedral, e impulsó numerosos convenios de restauración.

*Preocupación social con el impulso de las Cáritas en todos los niveles, la apertura de la segunda y tercera fase de la Casa de Acogida en el Sauzal y las Casas de Icod y Tacoronte.

*Renovación del servicio de la vicaría judicial.

*Se mejora notablemente la comunicación interna y externa de la diócesis creando la oficina de prensa del Obispado, puesta en marcha del proyecto de Popular TV y la revista diocesana.

*Apertura de la Residencia sacerdotal.