TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife
La sociedad civil tinerfeña se mueve, y en esta ocasión motivada por la defensa de sus menores. La necesidad de dotar con mejores armas a quienes luchan para prevenir y combatir la pederastia en la Isla ha motivado a la Gestora de Vecinos Toscal-Santa Cruz de Tenerife a encabezar un frente que posibilite la adopción de medidas que consideran necesarias para dotar de mayor protección a estas víctimas.
Los objetivos de esta iniciativa, tal y como detalla a este periódico el presidente de dicha gestora, Abel Román, son básicamente tres. El principal es lograr la divulgación de la llamada Regla de Kiko, que es una guía tanto para la detección como para la primera respuesta, y cuyos destinatarios son tanto progenitores como menores.
El segundo objetivo pasa por lograr que la Administración autonómica y la de Justicia adopten un protocolo de actuación acorde a la gravedad de este tipo de situaciones.
Y el tercero es lograr la máxima divulgación posible del número 116 111, que es el teléfono de atención a la infancia de la Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo).
Tal y como resume Abel Román, estos y otros objetivos se persiguen con el mismo fin, que es “evitar la segunda tortura al niño”, es decir, que su denuncia por lo sufrido no conlleve un calvario para la víctima, sino que reciba la atención “que merecen y no las que les caiga en suerte, como ocurre en la actualidad”.
Respaldo y comisión
Entre los respaldos obtenidos por la Gestora destacan a nivel insular la Federación Insular Tinerfeña de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Fitapa) y a nivel nacional la ya citada Fundación ANAR. Además, entre los asesores de la gestora figuran especialistas de La Laguna y conocidos abogados, que prestan su colaboración desinteresadamente. Lo mejor es que esta iniciativa cívica ya cosecha sus primeros éxitos. Ayer mismo, los representantes de la gestora se reunieron con la viceconsejera autonómica de Educación, Manuela de Armas, que se mostró muy interesada en los planteamientos de estos ciudadanos, al punto que anunció la creación de una comisión de trabajo con la Consejería regional.
Entre los defectos por pulir está la ampliación del área de actuación de su departamento a los centros concertados y privados en los que se detecten estos casos, algo que en la actualidad se le limita a los centros públicos.
Los siguientes pasos de la gestora son una reunión con la fiscal jefe provincial, Carmen Almendral, y otra más con un representante de la magistratura aún por concretar. Eso sí, el objetivo es seguir sumando adhesiones y ya se han entablado contactos con los representantes diocesanos de Educación y de Familia para sumar a la Iglesia en esta iniciativa contra la pederastia.