El grandioso crucero Celebrity Solstice hace su escala de posicionamiento por primera vez en Tenerife. / SERGIO MÉNDEZ
CECILIA BARREIRO | Santa Cruz de Tenerife
El puerto de Santa Cruz de Tenerife es actualmente uno de los más importantes del Atlántico. Tanto es así que, según ha afirmado el presidente de la Autoridad Portuaria, Pedro Rodríguez Zaragoza, “está en el puesto 23 del mundo, el 14 de Europa y es el tercer puerto más importante del país”. Tan solo este mes de abril han pasado por la Isla más de 22.000 cruceristas.
Ayer, por ejemplo, se encontraban atracados en el muelle capitalino dos cruceros de lujo que embellecían el paisaje con sus más de 300 metros de esplendor. Uno de ellos era el crucero Liberty of the Seas, de la empresa Royal Caribbean, en el que viajan más de 3.400 pasajeros, con una tripulación de 1.300 personas, 10 piscinas, jacuzzis y más de 100 tratamientos de SPA.
El otro, es el llamado Celebrity Solstice. DIARIO DE AVISOS, tuvo la oportunidad de conocer su lujoso interior por invitación de la compañía. Con 2.850 pasajeros a bordo, realizó ayer su escala de posicionamiento en la Isla. Es su primer atraque en Tenerife, por lo que su capitán, Yannis Berdos, recibió una metopa conmemorativa de manos del presidente de la Autoridad Portuaria. Este buque pertenece al armador Celebrity Cruises, del grupo Royal Caribbean, y se construyó en el año 2008 en Papenburg (Alemania).
Viaja con bandera de Malta. Es una unidad de 122 mil toneladas, 315 metros de eslora y manga de 48 metros. Tiene 15 plantas, 15 cubiertas, de las cuales dos son al aire libre. Posee un total de 1.048 camarotes de nueve clases diferentes, entre los que se encuentran dos de clase presidencial. Este último tiene unos privilegios diferentes, como un restaurante exclusivo, además de otros para la utilización de todos los pasajeros: un bufet, restaurantes especializados en platos típicos de diferentes países como de comida china, francesa e italiana. Incluso, posee un restaurante más pequeño solo para la realización de crepes. Aparte de todas estas peculiaridades culinarias, es el primer navío con césped natural diseñado para jugar al golf dentro del barco. En definitiva, es un hotel flotante de cinco estrellas que ofrece muchas comodidades: gimnasio, SPA, discotecas, tiendas, bares, venta de colecciones de obras de arte, entre otras cosas. Ser huesped de este tipo de embarcación es un lujo para quien se lo pueda permitir, pero, además, los empleados se encuentran muy satisfechos con este trabajo, según confiesa Luis Gomes, encargado de Relaciones Humanas del Celebrity Solstice: “Estoy encantado con mi trabajo. El relacionarme con los huéspedes me permite conocer diferentes culturas ya que tenemos clientes de más de 80 nacionalidades diferentes”.
Si se quiere disfrutar de un crucero de diez días a bordo de este navío los precios rondan desde los 1.600 euros la habitación más sencilla por persona, hasta los 16.000 euros la presidencial.
Además del Celebrity Solstice, la compañía Celebrity Cruises posee los cruceros Celebrity Eclipse, Celebrity Equinox, Celebrity Silhouette y Celebrity Reflection. De ellos, los dos primeros ya han visitado el puerto de Santa Cruz de Tenerife. Y los otros dos, el Silhouette y el Reflection atracarán en la Isla a finales de este mismo año. Cada uno de ellos, con su lujo e impresionante estampa, hará resplandecer nuevamente el puerto santacrucero.
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Turismo y puerto
Ayer, en Santa Cruz, se produjo un bullicio y un movimiento urbano impresionante. Más de 6.000 pasajeros habían llegado en dos cruceros que atracaron haciendo escala en el muelle de la ciudad. El despliegue de medios turísticos movilizó más de una docena de guaguas y taxis. Además, según afirmó el presidente de la Autoridad Portuaria, Pedro Rodríguez Zaragoza, hasta en La Gomera, en cuyo puerto solo hay cabida para un crucero, ya han pasado a lo largo del año un total de 54. Actualmente, se encuentra ocupado y próximamente hará escala también el navío Aída. Se espera que en el puerto de Santa Cruz atraquen durante el próximo año más de 47 buques.
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