NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

El Ayuntamiento presentó este jueves la nueva organización del transporte urbano en Santa Cruz, una reorganización que, insistieron, mantiene todas las paradas y que va a permitir rebajar el déficit actual, que es de 12 millones de euros, a nueve, así como frenar la pérdida de pasajeros, que se cifra en unos 400.000 anuales.

El nuevo trazado, según detalló el concejal de Infraestructuras, Obras y Servicios, Dámaso Arteaga, se resume en que de las 30 líneas con las que cuenta en la actualidad la ciudad, 17 no sufren cambios de ningún tipo, mientras que siete experimentan modificaciones, cinco son absorbidas y se crea una línea, la 904.

La nueva red obliga a numerosos trasbordos puesto que la mayoría de modificaciones consisten en el acortamiento de líneas actuales con los barrios para fomentar bien el uso del tranvía, o bien el enlazar con otras líneas urbanas.

Este aumento en el número de trasbordos no supondrá un coste añadido para los viajeros puesto que serán gratuitos, siempre que el usuario disponga de un bono, ya que el billete sencillo no tendrá esta bonificación. Tanto el Cabildo como el Ayuntamiento especificaron que, de momento, no se van a modificar los precios, aunque sí que apuntaron que se tendrá que estudiar en el futuro una unificación de criterios entre ambas instituciones para ver si se elevan o no las tarifas urbanas.

Arteaga especificó que hay una parte de la red que durante los dos últimos años se le ha mantenida congelada la tarifa interurbana, concretamente las líneas de Anaga. “La tarifa se va a mantener tal y como está y para los pensionistas con rentas bajas, si antes tenían que abonar diez céntimos al Cabildo, ahora seremos nosotros los que expidamos esos bonos y de forma gratuita”.

Arteaga también detalló que, para que los ciudadanos conozcan mejor la nueva distribución, las guaguas serán gratis los días 5, 6 y 7 de mayo.

El director de producción de Titsa, Jacobo Kalitoviks, detalló el nuevo trazado de la red urbana de transporte de Santa Cruz. El primer cambio es que todas las líneas de Santa Cruz unifican su denominación con el número 900. De esta forma, las líneas que no cambian son las 933, 940, 941, 944, 935, 939, 945, 946, 947, 905, 908, 910, 912, 914, 916 y 917. Las líneas que desaparecen como tal porque son absorbidas por otras son: 907, 909, 913, 915 y 918, mientras que el resto sufre cambios en frecuencia y recorrido.

El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, acudió en la tarde de ayer a la sede del Distrito Suroeste para mantener una reunión de coordinación junto a otros ediles, técnicos de Titsa y representantes de las asociaciones de vecinos de esta zona de la capital, con el objetivo de informarles sobre el nuevo diseño del transporte urbano.

Próxima semana

Bermúdez destacó, a la conclusión de la reunión, que el Ayuntamiento de Santa Cruz “garantiza el mantenimiento del servicio público de transporte en el distrito Suroeste”, y agregó que, tras conversar con los representantes vecinales, “hemos acordado la creación de una comisión de trabajo que intentará la próxima semana alcanzar el mayor consenso en las líneas de guaguas para que los cambios se hagan de la mejor forma”.

La concejala Carmen Delia González, concejal de Movilidad, aclaró a los representantes vecinales que en la sesión plenaria de hoy viernes se debatirá la adenda de prórroga del convenio del servicio urbano con Titsa, pero matizó que en este documento “no se abordarán, de forma definitiva, las reestructuraciones, por lo que aún queda tiempo para negociar con los vecinos”.

La responsable municipal de Movilidad reiteró que en la adenda de prórroga del convenio se abordarán tres criterios: “los kilómetros, las jornadas de trabajo y el número de usuarios”.