EUROPA PRESS | Barcelona

Los Mossos d’Esquadra han detenido a una panadera por su presunta relación con el homicidio de dos mujeres octogenarias el 17 y 22 de mayo en Mataró (Barcelona), han confirmado a Europa Press fuentes conocedoras de la investigación.

Según testigos presenciales, este jueves por la tarde se llevaron detenida a la panadera del establecimiento, situado en la misma calle donde se produjo el segundo crimen, una mujer que conocía a las dos víctimas y tenia la llave de sus casas.

Junto a ella iban dos personas más de las que no ha trascendido cuál es su implicación en estos hechos.

La primera mujer muerta apareció en el número 2 del pasaje Enric Fité, en el mismo bloque de pisos donde vive la detenida, con varios golpes en la cabeza y días después se encontró a otra víctima degollada en el balcón del primer piso del número 2 de la calle Pompeu Fabra, si bien hasta este viernes no se ha confirmado que ambos casos están relacionados.

Fuentes vecinales han explicado que los Mossos d’Esquadra han trasladado a las 14.00 horas a la presunta asesina, esposada y con el rostro cubierto, a la panadería ‘La iaia Anita’ para reconstruir los hechos: la distancia entre el negocio y el edificio de la segunda anciana asesinada es de apenas 20 metros.

La detenida era amiga de ambas ancianas, que solían acudir a la panadería a desayunar, y tenía la llave de sus casas, ofrecida en confianza por las propias víctimas, por lo que las cerraduras de sus domicilios no estaban forzadas.

La presunta asesina, que abrió el negocio hace tres años, era conocida en el barrio por “ser muy cariñosa y cuidar de las ancianas”, han explicado los vecinos.

Cenicero de mármol

Según las mismas fuentes, la primera víctima, que vivía sola, recibió un fuerte golpe en la cabeza con un cenicero de mármol y fue hallada muerta en su domicilio a las 14.45 horas, momento en que la panadería estaba cerrada.

Cinco días después, los vecinos de la calle Pompeu Fabra, muy cercana a la vivienda de la primera víctima, alertaron del cuerpo sin vida de Conchita C. tras observar que una pierna por la que goteaba sangre sobresalía por el balcón de la vivienda.

Los vecinos, que han concretado que la segunda víctima era ex trabajadora de Telefónica, la han descrito como una mujer “muy elegante, educada y con mucho dinero”, por lo que el robo podría estar tras los asesinatos.