tribunales > agresión sangrienta en las fiestas laguneras de 2010

El que rajó la yugular a un chico de 14 años, en paradero desconocido

El Cuerpo Nacional de Policía lagunero lo atrapó el mismo día; ahora se le busca de nuevo. / DA

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

El joven acusado de asesinato en grado de tentativa por una sangrienta agresión acaecida en las laguneras Fiestas del Cristo de 2010 se encuentra en paradero desconocido, según desveló ayer a DIARIO DE AVISOS Ruth Hernández, abogada del chico al que supuestamente el imputado rajó la yugular con un casco de botella roto y al que, horas después, los especialistas del Hospital Universitario de Canarias operaron en el quirófano a vida o muerte, felizmente con éxito.

Precisamente, la fijación de la fecha para la celebración de la vista oral por estos hechos se encuentra pendiente de que se localice al presunto agresor, algo que la administración de Justicia ha intentado en varias ocasiones sin conseguirlo.

“Dada la tremenda gravedad de los hechos y la demostrada peligrosidad del imputado -declaró Hernández a este periódico-, confiamos en que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado redoblarán sus esfuerzos para dar con su paradero: el muchacho debe responder por lo que hizo y recibir el debido aleccionamiento para que aprenda un mínimo de respeto por la vida”
Como adelantó ayer este periódico, tanto la Fiscalía como la acusación particular que ejerce la citada letrada tinerfeña califican lo sucedido en la madrugada del sábado 18 al domingo 19 de septiembre de hace dos años en la plaza del Cristo como un delito de asesinato en grado de tentativa.

Sin embargo y a pesar de la gravedad de la calificación, el hecho de que al acusado le faltaran 17 días para ser mayor de edad limita la solicitud de responsabilidades a la adopción de una medida judicial por la que tendría que pasar tres años en un centro para menores con régimen cerrado y otros tres con libertad vigilada.

Según se detalló en la edición de ayer y tal y como se refleja en el escrito de la Fiscalía, fue durante la celebración aquella madrugada del festival Dj Aguere cuando el ahora acusado “tuvo un pequeño incidente tanto verbal como físico con otros chicos que hasta entonces no conocía y que, como él, habían acudido a la fiesta sin que conste acreditado que nadie, durante la revuelta, sufriera lesión alguna”.

Molesto por lo ocurrido, el ahora acusado -que fue detenido horas después de lo acaecido junto a otros dos muchachos en brillante servicio del Cuerpo Nacional de Policía-, buscó el respaldo de sus amigos y “armados con cuchillos y navajas y botellas de cristal rotas”, agredieron a los primeros, en hechos que tuvieron lugar junto a una churrería cuando ya se había terminado el concierto.

Cabe destacar que, cuando fue arrestado, el acusado portaba consigo ropa ensangrentada y el trozo de casco de botella roto que habría utilizado para agredir a los muchachos.

A resultas de aquel violento ataque, tres jóvenes acabaron lastimados, siendo el peor parado un muchacho de apenas unos 14 años de edad al que agredieron a traición, causándole “una herida latero-cervical izquierda y otra superficial en región mandibular izquierda que necesitaron de intervención quirúrgica de urgencia y de carácter vital”.