DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de La Palma

La larga y tortuosa espera que muchos vecinos de Timibúcar y Mirca han tenido que soportar para tener unas viviendas en condiciones no cesa. El Ayuntamiento ha hecho público que la Dirección General de la Vivienda del Gobierno de Canarias exige la la demolición de las casas antiguas para darle la calificación definitiva.

Esto supone que los vecinos no se pueden mudar a sus casas nuevas, que ya están terminadas, porque ese documento es necesario para contratar los suministros eléctricos y de agua. Desde el Ayuntamiento capitalino aseguran que están “buscando formulas que le permitan obtener la calificación definitiva y proceder a su entrega a los vecinos sin más demoras”. Y es que los 190.000 euros que cuesta la demolición supera las previsiones municipales y puede prolongar en exceso el tiempo de espera para los vecinos.