GABRIELA GULESSERIAN | La Victoria de Acentejo

Es de los pocos concejales de Fiestas de Canarias, por no decir el único, que se sube a un escenario y presenta una gala de elección de la reina. Así lo hace en Santo Domingo desde hace algunos años, primero como amigo del presidente de la comisión de fiestas y de todos los integrantes de la asociación de vecinos, y desde 2011, en calidad de edil victoriero. Es su forma de aplaudir la labor de todo el equipo humano que, año tras año, se implica decididamente en las actividades sociales del barrio.

-Qué características tiene Santo Domingo que lo diferencian de otros barrios de La Victoria?

“Es uno de los más conocidos y destacado del municipio, principalmente por las dotaciones educativas, culturales y deportivas que alberga, por la amabilidad de sus vecinos y el nivel de implicación que demuestran en cada una de las actividades que celebran. Hablar de Santo Domingo es hablar de un barrio activo los 365 días del año, con un nutrido grupo de vecinos que consigue robar tiempo de su vida familiar para dedicarlo a los demás, buscando siempre la sana convivencia y la defensa de los intereses generales de este bello núcleo. Para mí es como mi segunda casa, como un patio grande y abierto donde siempre se me recibe con los brazos abiertos”.

-¿Hay algún proyecto o infraestructura significativa en el Plan de Barrios municipal que afecta a Santo Domingo?

“La actual situación económica es muy complicada e impide poner en marcha actuaciones de gran envergadura. Pese a ello, el Ayuntamiento mantiene activo un plan permanente de embellecimiento y mejoras en los centros educativos, el campo municipal de fútbol y la plaza del barrio. El Museo de las Tradiciones, ubicado en Santo Domingo, se presenta hoy como uno de los atractivos culturales y turísticos más importantes de la zona, gracias al cual podremos subirnos al carro de la promoción turística. Todo ello sumado al mantenimiento de vías y elementos comunes, la señalización y el ajardinamiento de espacios públicos. A largo plazo, la inversión pasa por el centro infantil y la apertura de nuevas calles”.

-Hay vecinos que reclaman una entrada al barrio desde la autopista TF-5, cerrada hace unos siete años. ¿Se ha vuelto a contemplar esta posibilidad?

“Como vecino, nunca he estado de acuerdo con la decisión de convertir el barrio de Santo Domingo en un embudo con la boca hacia el este. Yo abogo por estudiar nuevas alternativas que permitan, por ejemplo, que una de las calles perpendiculares sea de sentido ascendente, o que se estudie la posibilidad del doble sentido en algunos tramos de la vía. La solución más realista llegará con la creación de una nueva calle, paralela a Santo Domingo por su cara norte, y que hará posible mejorar las comunicaciones en el barrio”.

-¿Cuál es su vinculación con el barrio? ¿Ha vivido o vive aquí?

“Viven algunos familiares y amigos a los que aprecio mucho. Como concejal, siempre que puedo me acerco a la plaza para conocer y escuchar la opinión de los vecinos. Solo así puedes entender sus preocupaciones y encontrarles una solución y también corregir cuando te avisan de que tu gestión puede mejorar”.