DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

“La crisis económica no puede convertirse en una crisis de derechos sociales”. Ésta es la premisa que ha llevado a los dos Colegios de Trabajo Social de Canarias a iniciar una “ofensiva” con la que hacer llegar al Gobierno de Canarias, a los grupos políticos del Parlamento regional y a todas las administraciones implicadas la necesidad de buscar fórmulas para mantener el sistema público de servicios sociales. El diagnóstico de ambas entidades es contundente ante una “situación crítica” por el incremento de los usuarios y los recortes presupuestarios”.

Según informa una nota de prensa, el primer paso de esta ofensiva tuvo lugar ya la semana pasada, cuando la presidenta del Colegio de Trabajo Social de Santa Cruz de Tenerife, Belén Luis, y su homólogo de La Palmas de Gran Canaria, David Muñoz, mantuvieron una reunión con la consejera de Políticas Sociales y Vivienda del Gobierno de Canaria, Inés Rojas, a la que hicieron entrega del un informe sobre la situación de los servicio sociales del Archipiélago elaborado por ambos colegios y que alerta del incremento de la pobreza, la marginalidad y la exclusión social como consecuencia de la grave crisis económica.

La consejera, que explicó las limitaciones presupuestarias de su departamento debido a los “recortes del Estado” se comprometió a mantener una “mañana de trabajo conjunto” para analizar las circunstancias especialmente desfavorables de los servicios sociales ante la merma de la financiación y el incremento de la demanda de los ciudadanos.

Rojas también se mostró dispuesta a estudiar las medidas no solo para paliar el déficit de financiación previsto, sino también para consolidar y ordenar la Red Básica de Servicios Sociales y dotarla de una capacidad de respuesta suficiente, especialmente ante situaciones de emergencia social.

Los colegios ofrecieron su disponibilidad para apoyar cualquier estrategia que mejoren la situación de los servicios sociales y le advirtieron de que se encuentran al borde del colapso.