EUROPA PRESS | Santa Cruz
La consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Margarita Ramos, ha afirmado este martes que las políticas llevadas a cabo desde su departamento en materia de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) han abierto el camino a la consecución de una economía más competitiva en el archipiélago.
Margarita Ramos ha expuesto que en los últimos años la línea de acción de la Consejería ha estado encaminada a “dar soporte a la innovación tecnológica de las empresas de las islas para ayudar a conseguir una economía internacionalmente dinámica y competitiva, capaz de favorecer un crecimiento dotado de cohesión social, duradero, creador de empleo, respetuoso con el medioambiente, solidario con los países en desarrollo, adaptado a la realidad ultraperiférica y, con ello, a la vocación tricontinental y atlántica de Canarias”.
En este punto, la consejera ha señalado que actualmente la actividad industrial supone en la Comunidad Autónoma el 3,5 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) y ha sufrido un ligero descenso en el número de empleos, pasando de los 37.392 en marzo de 2011 a los 35.724 en marzo del presente año. “Con este panorama, y ante los déficit tecnológicos que han sido tradicionales en las islas, no se escapa que resulta complicado establecer modelos de transferencia de conocimiento investigador a las empresas, pero esto en lugar de ser un inconveniente se ha convertido en un acicate para la Consejería”, ha apuntado.
De igual forma, Ramos ha indicado que a través del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), que celebra su vigésimo aniversario este año, se ha promovido la transferencia de conocimiento y tecnología a la sociedad y a las empresas canarias. “Su trabajo se ha concretado en campos tan dispares como las energías renovables, el agua, el análisis ambiental, la biotecnología, la ingeniería mecánica y biomecánica, la promoción del software libre, la instrumentación electrónica y las tecnologías de la información y las comunicaciones”, ha resumido.
Esta acción, según ha indicado Ramos, ha tenido consecuencias positivas en empleo, inversiones o infraestructuras. Así ha recordado que las empresas innovadoras tienden a crear más y destruir menos empleos que las no innovadoras y que a través de la inversión en I+D+i, ya sea por la participación pública o privada, se podrá superar las desventajas físicas de Canarias.
Por último, la consejera de Industria ha afirmado que se ha alcanzado ya un nivel de madurez tecnológica suficiente para que el conocimiento adquirido en el seno del ITC pueda ser explotado social e industrialmente. “Ahora es el momento de poner en valor y explotar estas infraestructuras y ponerlas al servicio de la sociedad y del tejido productivo, para lo cual hay estrategias concretas”, ha concluido.