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Mentiras > Jorge Bethencourt

Uno de los efectos del exterminio de la banca pública en España es la desaparición de las obras sociales de las cajas. Cuando aún nos vendían aquello de que la unión hace la fuerza, el mensaje era que los impositores decidirían a dónde iría su dinero. Al final, como en todos los finales de la vida real, nuestro dinero irá a sus beneficios. A las indemnizaciones multimillonarias con las que se premia a los gestores que han oficiado el entierro de las cajas.

Mientras intentamos deglutir que un despido con veinte días es algo que tenemos que asumir para hacer el mercado laboral español competitivo con Europa, la aristocracia de las cajas se despide a sí misma con millones de euros de colchón. Digerir los dos razonamientos en paralelo desafía la salud gástrica.

El fin del viaje de las cajas es pasar a manos de los grandes bancos. En España, al final, como en Los Inmortales, sólo pueden quedar cuatro o cinco. Entramos en el oligopolio de la banca sana. Pero la lozanía financiera se va a lograr a base de transfusiones provenientes de la hemoglobina financiera nacional.

Los gobiernos, de izquierdas y de derechas, inyectan el dinero de nuestros impuestos para salvar a las cajas de la hecatombe y evitar que se esfumen los apuntes contables de los ahorradores. Eso es bueno. Pero falso. Es que después entregaremos las cajas, ya limpias con nuestro dinero, en las blandas manos de esa banca cómplice de los partidos políticos y los gobiernos.

Me niego a ser razonable. Me importa la clara de uno y la yema del otro que la dación en pago sea jurídicamente discutible. Me importa un higo pico que los desahucios sean consecuencia de contratos firmados libremente entre partes. Que les den. Si se sigue permitiendo que el Banco de España actúe como la ONCE con los grandes pufos de las cajas, si se indulta a los banqueros, si se condonan créditos a los partidos, si se permite que los que arruinaron la banca pública, las cajas, se retiren cobrando millones… que le vayan a pedir sentido común a la madre que les trajo a todos a este valle de impagos.

Nos engañaron diciendo que haciendo la fusión fría cajas se salvaría el modelo. Nos mintieron diciendo que la banca española estaba saneada. Ya no caben más falsedades en el corazón helado de una sociedad civil que no hace más que pagar para que los sacerdotes del Estado providente puedan seguir gastando.

Twitter@JLBethencourt