JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
Después de dos años de lucha, los vecinos de El Sobradillo han dicho ‘basta’. El motivo, los reiterados incumplimientos del Ayuntamiento santacrucero respecto a la instalación y mantenimiento de las antenas de telefonía móvil, que según los vecinos han provocado graves problemas de salud a algunas personas del barrio.
Así, según explicaron ayer a este periódico desde la Plataforma contra las antenas de telefonía móvil (Planmocan), después de haber dado de plazo hasta el pasado 31 de mayo al gobierno municipal, para que como mínimo se hubieran cancelado ya las emisiones de dos de las antenas (en La Quebrada, en María Jiménez, y otra en la calle Caléndula, en El Sobradillo), desde el Consistorio han dado la callada por respuesta.
De hecho, recordaron desde la plataforma, ni siquiera se ha tenido en cuenta la redacción del convenio de colaboración entre el ayuntamiento y los vecinos, por el cual la plataforma estaba dispuesta a ceder su aparato de mediciones para que los técnicos municipales pudieran dar fe de que las emisiones de las antenas situadas en la zona están “muy por encima de los niveles aconsejables para la salud”.
“Pasa el tiempo y sólo hemos visto buenas intenciones, pero no han querido poner remedio al problema”, denotó Juan Daniel Marrero, uno de los portavoces de Planmocan. Por ello, y a la espera de que el ayuntamiento capitalino mueva ficha, los vecinos acordaron el pasado viernes en asamblea tomar medidas para que de una vez les hagan caso.
Así, esta tarde, a partir de las 19 horas, desde la Asociación de Vecinos 7 Islas de El Sobradillo, partirá una singular comitiva que visitará las tres antenas, haciendo un recorrido protesta con pancartas y encendiendo y dejando velas que permitan ver a los vecinos que en esos puntos hay una antena. “La acción se repetirá a lo largo de toda la semana”, subrayó Marrero, quien aseguró que el viernes se llevará a cabo otro acto de protesta “más contundente” en el ayuntamiento. “Llegaremos hasta el final en esto”, insistió el portavoz de la plataforma, que explica que son tres las antenas principales que son objeto de las quejas vecinales, que se hallan situadas a corta distancia una de otra y que forman una especie de triángulo electromagnético que a quienes coincide a corta distancia les provoca dolores de cabeza y otros problemas de salud.