Nadie lo dudaba; ni siquiera yo. El Padre José de Anchieta tiene casa lagunera. Vivió en la plaza del Adelantado, en la Villa de Abajo. Fue bautizado en Los Remedios, un 19 de marzo de 1534, e hizo vida lagunera. En la ciudad de Aguere recibió su primera formación espiritual y cultural que, seguramente, se reflejaría después en él, en este hombre de fe y cultura. Esto ha llevado a dos cosas, a que célebres latinistas laguneros se ocupen de investigar textos de este lagunero ilustre, como lo han hecho en esta última época los profesores José González Luis o su hermano Francisco. También ha conducido a que la Hermandad de Caballeros, que lleva el nombre del Beato Padre Anchieta, logre uno de sus sueños, que la casa de Anchieta sirva para promover actividades vinculadas a la vida y obra de José de Anchieta, un lagunero lleno de Cristo. Y en este último punto juega un gran papel el Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna, entendiendo que desde la casa de Anchieta se han de promover fe y cultura. Por cierto, sería un lujo un reportaje de contraportada firmado por Agustín González sobre Anchieta en la sección Imágenes con historia del DIARIO DE AVISOS.