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De barrio obrero a barrio de parados

El barrio de Los Gladiolos, en el centro de Santa Cruz, está formado por más de una treintena de altos bloques de viviendas. / CAROLINA MARTÍN

JESSICA MORENO | Santa Cruz de Tenerife

Desde la creación del barrio de Los Gladiolos, en el centro de la capital tinerfeña, y los motivos que lo impulsaron, muchos años han pasado ya y la situación actual nada tiene que ver con aquellas décadas. A mediados del siglo pasado se impulsó la edificación de las primeras barriadas de esta zona, como son La Candelaria y José Antonio. A partir de ahí se fue edificando poco a poco el resto de los altos bloques de edificios que caracterizan este enclave.

La historia de este núcleo está muy ligada a la de la Refinería de Cepsa, puesto que los primeros edificios tenían como fin albergar a los trabajadores y las familias que prestaban un servicio en esta compañía. “Por eso la mayoría de los vecinos de esta zona eran de clase trabajadora, humilde”, explica el presidente de la Asociación de Vecinos Azorín, José Ramón Del Olmo. Este inicio ha marcado el actual perfil del ciudadano que vive en el barrio. De hecho, hay un alto porcentaje de personas mayores, gran parte jubilados de la Refinería, y también de clase trabajadora. Por contra, el representante vecinal explica que hay muy pocos jóvenes, ya que la mayoría ha dejado el barrio e insiste en que la crisis y el paro les ha afectado bastante, y hay un alto índice de desempleados. Los Gladiolos está formado, básicamente, por elevados bloques de edificios, con sus diferentes comunidades de vecinos. Precisamente, este factor hace que sea una de las localidades más pobladas del municipio. Así, se calcula que en esta zona habitan más de 20.000 vecinos, según calcula el presidente del colectivo vecinal. Una de las características del barrio es que en este se encuentra concentrada una buena parte de los institutos del centro de la capital. De hecho, la localidad acoge los centros de Educación Secundaria Teowaldo Power, Andrés Bello, Poeta Viana y Benito Pérez Armas. A ello se suman varios centros de Educación Primaria, entre otras dotaciones similares, lo que hace que, a diario, sus calles estén muy transitadas por los jóvenes del municipio.

Otra de las infraestructuras que ha caracterizado la historia del barrio es el centro de inserción social, que antiguamente era el centro penitenciario Tenerife I, el cual que fue trasladado a La Esperanza, entre otros factores, por las demandas vecinales. Además, otra de las infraestructuras sociales que ha marcado la historia de Los Gladiolos, y ha provocado un rechazo de los residentes, era el antiguo albergue insular, que hoy en día se ha convertido en el centro de acogida municipal para personas sin recursos. Desde hace varios años el hecho de que este espacio se encuentre en este enclave ha provocado que los vecinos demandaran su traslado, ya que en ocasiones los usuarios del centro provocaban altercados. Aun así, Del Olmo reconoce que actualmente estos problemas se han mitigado y la situación se ha solucionado bastante, ya que también se ha reforzado la vigilancia policial en la zona. “La situación con el albergue ha mejorado en el 80%; no se ven tantos problemas como antes”, indica el representante vecinal.

La presencia policial, también, ha hecho que uno de los principales problemas que tenía el barrio hace años, que era la delincuencia, se haya reducido, según explica el presidente del la Asociación de Vecinos Azorín. “Antes había muchos problemas con las drogas, y otros actos delictivos, pero esto ha desaparecido por completo. De hecho, los vecinos antes casi no podían salir a la calle y ahora las cosas han cambiado”, apunta.

Características

“Creo que la característica del barrio ha sido que la gente se ha llevado siempre muy bien, se ha ayudado mucho y era como una gran familia, aunque hoy en día la situación no es esa”, asegura el dirigente vecinal de Los Gladiolos.

Además, insiste en que la zona ahora mismo está bien dotada, al contar con varios centros educativos y sanitarios, y bien comunicada con el transporte público, pero demanda más atención municipal. En este sentido, ha pedido más limpieza y mantenimiento de las zonas públicas, como las vías y los jardines, al igual que se mejore la seguridad vial en una de las entradas desde la autopista, “donde todos los días hay algún accidente”. Por último, insiste en que carecen de espacios sociales como guarderías, ludotecas o centros para mayores y pide, de nuevo, recuperar algún espacio municipal para albergar estos servicios.

Los vecinos piden reforzar la limpieza de los jardines

El barrio de Los Gladiolos es uno de los más populosos de la zona centro de la capital tinerfeña. Así, se estima que en él viven cerca de 20.000 personas, la mayoría mayores o jubilados. Entre las peticiones de los residentes está un mejor servicio de limpieza para las calles y jardines, más actividades para los jóvenes y los niños del barrio y la mejora de la seguridad vial es una de las entradas desde la Autopista.